Tras la decisión del Consejo Monetario Nacional de autorizar la inspección por control remoto de las operaciones de crédito del Programa de Garantía de la Actividad Agropecuaria (Proagro), crece la perspectiva de que, en cierto momento, la medida también pueda ser aprobada para las operaciones del seguro rural.
A partir del próximo enero, los bancos comenzarán a usar imágenes de satélite o de vehículos aéreos no tripulados, como drones, para cumplir el reglamento. Hasta ahora, los bancos realizaban visitas físicas por muestreo para evaluar si los prestatarios de Proagro estaban aplicando correctamente el dinero del préstamo. Las tecnologías remotas serán exigidas para controlar los préstamos superiores a 300.00 reales (94.975 dólares).
A partir de julio, la inspección por control remoto también será obligatoria para operaciones de crédito por encima de los 40.000 reales (12.663 dólares). Además de inspeccionar las propiedades, los bancos tendrán que informar al Banco Central de las coordenadas geográficas de emprendimientos financiados. Entre las operaciones de crédito a ser inspeccionadas están el coste de la financiación de cultivos, las líneas de crédito para la formación o la recuperación de los pastos y los préstamos para la inversión en cultivos permanentes o bosques, según la Agencia Brasil en información de la que se hace eco ‘CNseg’.
Los bancos que no opten por la inspección por control remoto tendrán que realizar la revisión presencial en todos los proyectos financiados, sin la posibilidad de utilizar muestras. Según el Banco Central, la medida fue tomada para incentivar a las instituciones financieras a usar imágenes de satélites y los drones.
(fuente: BDSAL – 30/6/15)