Las mujeres emprendedoras son más innovadoras pero les falta confianza

(f) Confianza, confianza y más confianza. Ese es el principal ingrediente que deben integrar las mujeres a la hora de emprender.

Así lo afirmó Laura Altschuler, directora de Duo IDB, una de las dos conferencistas internacionales que participaron en el evento del programa Más Emprendedoras, de Endeavor Uruguay, realizado la semana pasada. «Las mujeres deben animarse, dar el primer paso, salir de la `zona de confort` y comenzar a emprender», apuntó.

Es que según la experta del Fomin, Federica Gómez, hoy día las mujeres emprenden más por necesidad que por oportunidad de negocios. «No tienen percepción de capacidad para emprender, hay menos confianza y mayor miedo al fracaso». Esto ocasiona que pocas veces crezcan más allá de la microempresa. Incluso tan solo un 9% de las grandes empresas en América Latina tienen a una mujer como líder y, de los emprendimientos femeninos, más de un 50% no tiene personal a cargo. «Desarrollar redes de contención y, sobre todo, brindar acceso a créditos es la clave para esto», indicó.

De todas formas, el panorama regional se presenta alentador. Los emprendimientos innovadores son el motor de la economía de los países, y en este marco, las mujeres son las que lanzan más productos innovadores, reveló Isabelle Chaquiriand, profesora del Centro de Emprendimientos Deloitte del IEEM.

En este contexto, Uruguay está bien posicionado. A modo de ejemplo, Endeavor ya cuenta con unas 550 mujeres registradas de las cuales un 40% tienen un emprendimiento en marcha. El país se destaca por el alto nivel de capacitación, habilidades, seguridad y estabilidad, pero su principal carencia es el acceso a la financiación. Solo un 20% han sido financiadas por el sistema bancario y únicamente un tercio accedieron a un depósito bancario.

Explotar su diferencial.

Para Altschuler no existe una fórmula de éxito pero la confianza es clave. «Conocerse e imponer un sello personal, saber en qué son buenas y qué les apasiona permite aprovechar mejor las oportunidades para innovar», indicó.

Para esto, tener coraje, compromiso, enfoque en el tema y, sobre todo, pasión. Animarse, aunque esto implique un fracaso. Creatividad, riesgos y beneficios son parte de este proceso, aseguró. «Hay que salir de esa zona de confort e ingresar al área de aprendizaje aunque implique fracasar alguna vez. Transformar el miedo en acción», sugirió. Es que para Altschuler, hay que fallar alguna vez para poder innovar.

En tanto, Marta Cruz, socia fundadora de la aceleradora NXTPLabs (Argentina) definió a la mujer emprendedora como creativa, con gran capacidad de resiliencia, organizada, consistente con su discurso y, sobre todo, femenina.

A la hora de presentar un proyecto, Cruz aconsejó tener confianza en los proyectos, transmitir entusiasmo, conectarse con el otro y, sobre todo, explicar en forma clara la idea. Destacó además, conformar un buen equipo, tener clara la oportunidad y el tamaño del mercado que persiguen realizando productos regionalizables y además, si es posible, contar con compañías comparables ya validados en el mercado.

Sobre Uruguay, la especialista apreció que el ecosistema está en crecimiento, aunque aun sin orden. En este sentido, la cercanía con Argentina permitirá «un acceder a un sistema maduro que puede ayudar a crecer».

Cruz consideró asimismo que debe haber sintonía entre gobierno y sector privado; estimó que en la región hay un despertar de ese compromiso. En este sentido, Colombia es un buen ejemplo a seguir, concluyó.

(fuente: http://www.elpais.com.uy/el-empresario/mujeres-emprendedoras-son-mas-innovadoras.html Por Antonio Larronda)

 

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