Un encuentro para reflexionar sobre el empleo del siglo XXI

Ex presidentes y empresarios hablaron sobre las capacidades necesarias para los futuros trabajadores y también sobre la postergación de la jubilación

Tendencias y nuevas formas de trabajar marcaron los temas del encuentro Empleo en el Siglo XXI, XX Reunión Plenaria del Círculo de Montevideo, en la República del Paraguay. Allí se congregaron destacadas personalidades para hablar sobre el futuro del trabajo. Tender puentes fue el leitmotiv, una estrategia con el fin de potenciar a todos los sectores con la mira en el crecimiento de la región. Puentes para que «entre un Estado estable, oferente, regulador, garante se combine una actividad privada dinámica, innovadora, capaz de competir con una mirada hacia el mundo», dijo Julio María Sanguinetti, ex presidente de Uruguay y presidente de la Fundación Círculo de Montevideo.

Presentó al Círculo como «un grupo de reflexión, un grupo de pensamiento, un grupo que trata, en un mundo de cambio vertiginoso, de orientarnos desde el punto de vista de las ideas, de las experiencias, de la búsqueda de un rumbo».

Sanguinetti explicó que hoy hay más oportunidades para la gente que sabe adaptarse a los cambios, pero también más inestabilidad. «Aquel empleo para toda la vida, que era el horizonte de nuestros padres y de nuestros primeros años, se ha ido diluyendo. Hay una enorme inestabilidad y eso genera insatisfacciones… la gente desencantada es presa fácil del demagogo, del iluso, del utopista… lo que se logra más tarde son desencantos mayores e hipotecas que habrá que levantar en el futuro.»

«Paraguay está viviendo un momento muy especial: desde hace varios años, se viene destacando por su estabilidad económica, por su crecimiento. Pero lo más importante es que esto se gestó con la gran reforma tributaria que hemos hecho, así como con unas cuantas leyes para fomentar la producción, la industria y el desarrollo. Nos queda aún el gran desafío, que es disminuir la pobreza mediante la creación de empleos. De ahí la importancia de esta reunión», dijo Eduardo Felippo, presidente de la Unión Industrial Paraguaya (UIP), a la hora de abrir la jornada.

El empresario mexicano Carlos Slim dio su visión de los empleos que vienen para los cuales hay que estar preparados porque a través del crecimiento económico con participación del empleo y educación se puede combatir la pobreza. En este sentido, profesionales de la salud, para una población cuya expectativa de vida es cada vez mayor, y de la educación, que puedan poner en marcha nuevas herramientas que permitan razonar, serán competencias muy valoradas para los empleadores. Otra área que Slim ve cada vez más importante es la del entretenimiento para personas que estima tendrán cada vez más tiempo libre, y también la del turismo.

«Las personas ya no se retirarán a los 60 años, sino quizás a los 70 o 75, pero trabajando sólo tres días a la semana… El promedio de vida es de 86 años. No es racional, entonces una jubilación tan temprana, ni sostenible ese estado de bienestar.»

Felipe González, ex presidente del Gobierno de España, dijo que «hay que tener una formación flexible y continua para disfrutar de la empleabilidad. En una sociedad de cambio rapidísimo y profundo, tendremos que tener la capacidad de adaptarnos a distintos puestos de trabajo a lo largo de la vida profesional».

De acuerdo con Slim, habla sobre cómo debería evolucionar la jubilación. «Cuando el marisical Bismarck decide, en Alemania, que la persona que trabaja hasta los 65 años merecería un descanso pagado, una pensión, uno de cada cien pasaba esa edad y 99 de cada 100 eran responsables del sistema de pensiones.» Se refirió más tarde a que en España «por un pensionista pagan dos activos». Por lo tanto, según González, hay que aumentar el tiempo de vida laboral en la medida en que aumenta la esperanza de vida.

«Trabajo ya no significará lo que significaba antes», dijo el ex presidente de Brasil Fernando Henrique Cardoso. Se refiere a una carga, un desgaste físico. «Es la alegría de la innovación, de la cultura, de la participación en los diferentes caminos de la vida, y estar junto a otras personas capaces de hacer lo mismo», dijo.

También se refirió al bajo desempleo en Brasil y a la paradoja de las protestas. «La gente, además de acceso a la educación, a la salud, a la tierra, quiere calidad.»

El empresario Alejandro Bulgheroni afirmó que las empresas exitosas invierten más de sesenta billones de dólares al año en capacitación y desarrollo, según el Corporate Learning Factbook de 2013, por lo cual la capacitación debe verse como una inversión y no como un gasto.

Mostró también un informe del World Economic Forum, que hace un estudio en ciento cincuenta países. Se demuestra que el nivel de competitividad está directamente relacionado con la infraestructura, la calidad institucional y la enseñanza. Suiza está primero, Finlandia segundo, y Singapur, tercero. «En esta zona de América latina, hay una gran labor por delante. Chile está bastante mejor y le siguen México, Brasil, Perú, Colombia, Uruguay, la Argentina y Paraguay. Evidentemente si nuestros países no tienen calidad en la competitividad global, va a ser muy difícil que las empresas sí la obtengan».

(fuente: http://www.lanacion.com.ar/1755891-un-encuentro-para-reflexionar-sobre-el-empleo-del-siglo-xxi)

Lectura sugerida por Presidencia del CA – Muchas gracias María Belén Gomez por aportarla.