Tarjeteo al rojo vivo: gastos de argentinos en el exterior son récord y meten más presión a las reservas

compra con tarjeta en el exteriorLos saldos por compras con plásticos alcanzaron una nueva marca desde el fin del «1 a 1» para el inicio de octubre. De no mediar cambios, la «factura» por viajes podría alcanzar los u$s8.500 M en todo 2015, más del doble que el nivel de tenencias netas con las que culminaría el BCRA

Aun faltando más de dos meses para que el calendario marque el inicio de las vacaciones de verano, las estadísticas que están llegando a manos de los técnicos del Banco Central generan una profunda preocupación.

El «tarjeteo» por parte de argentinos en el exterior ya es récord para el arranque de octubre desde la salida de la convertibilidad.

De la mano del debilitamiento de monedas como el real o el peso chileno frente al dólar, del boom de cuotas en pesos sin interés para financiar viajes hasta en 24 meses y de la incertidumbre respecto del futuro del tipo de cambio, el turismo emisivo está viviendo un auge que, mes a mes, no hace más que potenciarse.

De acuerdo con datos publicados por la entidad que conduce Alejandro Vanoli, en el inicio de octubre, los saldos por compras con tarjeta de crédito en moneda extranjera alcanzaron los u$s555 millones.

Esta cifra no sólo implicó un salto del 60% respecto del mismo período del año pasado, sino que también se trata de una marca histórica para esa fecha desde fines del 1 a 1

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Las divisas que el Banco Central está perdiendo en concepto de gastos con tarjeta se convirtieron en un gran «termómetro» del nivel de atraso cambiario.

Sin ir más lejos, en el año 2008, cuando el salario promedio en dólares de los argentinos se ubicaba un 20% por debajo de los niveles de 2001, dicho ni siquiera superaba los u$s100 millones.

De modo que, con remuneraciones que corrieron por encima de la evolución del billete verde, los gastos con plásticos se multiplicaron por seis en el término de siete años.

Al explicar este auge, fuentes de la Asociación de Viajes y Turismo (Aaavyt) coincidieron en señalar como un factor preponderante la recuperación del salario en términos de dólar y la debilidad de monedas de países clave en materia turística, como el real brasileño, el peso chileno o el euro frente a la divisa estadounidense.

En el plano interno, con una devaluación acumulada del 11% en lo que va del año e ingresos que corrieron cerca o por encima del 30%, las billeteras pasaron a «rendir» más a la hora de viajar al exterior.

Y este escenario, sin dudas, es el que está marcándole el pulso al nivel de gastos de los argentinos, aun cuando todavía falten más de dos meses para el inicio de la temporada alta.

Desde la consultora Ecolatina hicieron hincapié en la particularidad de que «el salario real está estancado pero es récord en dólares».

«Si bien la devaluación de 2014 contrajo el indicador, rápidamente se recuperó la tendencia previa y actualmente el ingreso promedio, medido en divisas estadounidenses, supera en un 45% a los valores existentes durante la salida de la convertibilidad», advirtieron.

Como contrapartida, el poder de compra de los sueldos -en términos reales- desde el año 2007 prácticamente está estancado.

El siguiente cuadro permite apreciar cómo las «billeteras» de los argentinos pasaron a rendir más en dólares pero no mejoraron en pesos. 

Este doble juego entre el poder de compra de los argentinos fuera del país y en el mercado interno, según Ecolatina, «por un lado desincentivó la creación de puestos de trabajo e inversión, mientras que paralelamente funcionó como un estímulo para la compra de bienes y servicios del exterior«, como los autos importados y el turismo.

Frente a este cuadro, el economista Gabriel Caamaño Gómez afirmó que «con el dólar barato, lo que terminó haciendo el Gobierno fue impulsar la compra de viajes al exterior. Esto implicó claramente una transferencia de riqueza hacia actividades improductivas, a costa de sectores que agregan valor».

Presión extra para las reservas
Cabe destacar que este fuerte dinamismo que están cobrando los gastos por tarjeta en el exterior representa una parte de la «factura» que deberá bancar el BCRA en concepto de turismo.

En efecto, actualmente el 65% de todas las divisas que la entidad habilita para cubrir la demanda de este rubro están explicadas por el «tarjeteo«. A esto hay que sumar el 35% restante, explicado por los giros de las agencias y aerolíneas a proveedores de servicios fuera del país y por las ventas de dólares a través de ventanillas oficiales (con recargo del 35%).

Hasta septiembre, se estima que la «factura» global por estos conceptos sumó unos u$s6.400 millones, un 30% más que en igual período de 2014. Así las cosas, diversas consultoras plantean que el turismo se encamina a «barrer» con unos u$s8.400 millones en todo 2015.

Esta cifra -a la que podrían sumarse sumar más de u$s6.500 millones en concepto de «dólar ahorro» (oficial + 20% de recargo)-, no hacen más que incrementar la presión sobre las reservas.

No es para menos: por estos dos conceptos, los particulares en todo 2015 se estarán llevando el equivalente a casi 9 saldos comerciales, dado que la diferencia entre exportaciones e importaciones este año no superaría los u$s1.700 millones, marcando así el peor nivel en cerca de 15 años.

Estas cifras, por cierto, generan inquietud en el Banco Central, especialmente tras la cancelación del Boden 2015.

Según estima la consultora de Miguel Kiguel, si a las reservas brutas se le restan u$s11.000 millones del swap con China, u$s8.300 millones de encajes de depósitos en los bancos y u$s1.900 millones de pagos de deuda retenidos por el juez Griesa, entonces las tenencias netas del Central a duras penas llegarían a los u$s3.800 millones hacia fin de año.

Para agregar más tensión en el frente cambiario, a pocos días de las elecciones que definirán el futuro de la Argentina, la calificadora de riesgo crediticio Moody’s advirtió que el candidato que se imponga en los comicios, como una de sus primeras medidas, deberá hacer frente a la escasez de divisas de manera urgente.

«Las reservas alcanzan para sobrevivir hasta el 10 de diciembre«, afirmó con suma crudeza Gabriel Torres, vicepresidente de la entidad y analista encargado de calificar al país.

En el equipo que comanda Daniel Scioli hay una fuerte preocupación por la falta de dólares, y esto queda plasmado en la agenda económica trazada por los asesores del actual gobernador y candidato por el Frente Para la Victoria.

La «hoja de ruta» hace hincapié en todo un entramado de medidas para lograr el objetivo de darle oxígeno al aparato productivo y recuperar competitividad cambiaria pero sin devaluar de manera significativa.

La posible firma de un swap con Brasil, la búsqueda de fondos frescos provenientes de China y Rusia para obras de infraestructura y hasta los dólares que argentinos mantienen bajo el colchón, son algunos de los ingredientes del plan del actual gobernador.

Sin embargo, la gran pregunta entonces es cómo hacer frente a la «factura» turística en los próximos meses de no mediar un salto del dólar, dado que se mantendrán los incentivos para seguir viajando y «tarjeteando» en el exterior.

Al día de hoy, hay asesores políticos y económicos del candidato que sugieren que ese mismo día encare las primeras medidas concretas de su futuro Gobierno. La expectativa central es el cepo. Nadie piensa en una flexibilización sino, más bien, todo lo contrario.

Algunos asesores económicos prefieren que, no bien pasen las elecciones, la nueva administración deje de vender «dólares ahorro», que suponen una sangría de casi u$s700 millones mensuales.

Los más extremistas prefieren, incluso, el establecimiento de un tope para los gastos con tarjetas en el extranjero.

La cuenta pendiente
Mientras se fue potenciando la salida de argentinos, en el mercado interno se da el efecto contrario: se está contrayendo la llegada de turistas extranjeros.

«Desde 2010, mientras que a nivel mundial el número de viajeros ha aumentado más de un 20%, ese nivel resulta 10 puntos inferior cuando se computa el flujo hacia la Argentina. Si la referencia es el gasto promedio en dólares de los visitantes, la brecha se amplía, ya que a nivel mundial el aumento ha sido de 31%, mientras que en la Argentina ha caído un 6%», advirtió el economista Jorge Day, de Fundación Mediterránea.

Según un informe de la consultora, en varias provincias, la participación de viajeros extranjeros es elevada en relación a los turistas locales y también a la cantidad de habitantes. Es el caso de Tierra del Fuego, Santa Cruz, Río Negro, Chubut, Neuquén Mendoza, Salta, Misiones, Formosa y la Ciudad de Buenos Aires.

«Estas regiones se enfrentan al problema de la pérdida de market share que experimenta la Argentina en los flujos de turismo internacional, atribuible fundamentalmente a la menor competitividad que genera la política cambiaria», advirtió el experto.

(fuente: http://www.iprofesional.com/notas/221153-Tarjeteo-al-rojo-vivo-gastos-de-argentinos-en-el-exterior-son-rcord-y-meten-ms-presin-a-las-reservas)

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