RSE, un «negocio» políticamente correcto

(f) Según una encuesta global, en la Argentina el 82% de las empresas realiza prácticas de RSE bajo el argumento «porque es lo que se debe hacer», algo que marca tendencia en la región y se diferencia de los países desarrollados. Pero no es lo único a destacar. Nuestro país figura entre las naciones que más valoran la gestión de costos y la eficiencia energética.

Un nuevo reporte del International Business Report (IBR) de Grant Thornton revela que las empresas a nivel global están optando por prácticas orientadas a lo social y a lo sustentable. Sin embargo, hay matices en cuanto a los argumentos que las impulsan: la gestión de costos es el principal motivo con un 67%, el segundo es la demanda del cliente/consumidor con un 64% y tercero el concepto «es lo que se debe hacer», con el 62%. La particularidad recae en América Latina donde los factores de adopción son los mismos pero el orden se invierte: el principal es el «porque es lo que se debe hacer» con un 86% en México y un 82% en la Argentina; aunque sigue de cerca la gestión de costos con un 80% en la Argentina y un 72% en México.

«En Latinoamérica, todavía existe el fantasma que pregona que es necesario ejecutar estas prácticas porque es lo moralmente correcto a fin de seguir la tendencia mundial», razona Mariana La Menza, responsable de Marketing y Comunicación Corporativa de Grant Thornton Argentina. Para Luis Ulla, del IARSE, este mantra «tiene que ver con hacer lo correcto y no con cumplir una orden». Pero desde otra mirada, para La Menza se «refiere sin dudas a una obligación», aunque aclara que la tendencia mundial demuestra que en la última década existe un verdadero cambio de cultura en las compañías en torno a la RSE. Más escéptico, Ariel Giménez, consultor en competitividad sustentable se pregunta sobre cómo indagaron a los 2.500 empresarios de 34 economías que participaron del sondeo. «No lo veo obligatorio, tiene que ser voluntario para que haya compromiso genuino», explica y relaciona el crecimiento de estas prácticas a factores de construcción de marca y para reclutar o retener talentos.

«La RSE debería verse como una práctica ligada al negocio», resume La Mena, y la Argentina es consciente de esto ya que se ubica entre los 10 países que valoran gestión de costos entendida como la planificación de gastos para optimizar recursos. En el top ten el país está sexto con un 80%, siendo la media el 67%.

Otro de los datos destacados se relaciona con el uso eficiente de la energía y la gestión de residuos con un 71%, ubicándolo séptimo y un 6% por encima de la media. «Estamos comenzando a tener una mayor conciencia ecológica. Si bien durante períodos de crisis la reducción de costos se convirtió en una norma, hoy la mejora en la eficiencia energética está instalada en las grandes compañías», refuerza La Menza.

Pese a los matices, lo importante es que a nivel global siguen creciendo las prácticas de RSE y también los reportes. En los últimos tres años las empresas que informan sus actividades sustentables pasaron del 25% al 31% y las que están de acuerdo con los informes y que realizan acciones subieron de 44% a 57%. Entonces, como cita el informe, «la sustentabilidad llegó para quedarse».

(fuente: ambito.com – Por: Diego González – 1/9/14)