Los actuarios europeos avanzan en un estándar sobre el informe de la función actuarial

El presidente del Instituto de Actuarios Españoles (IAE), Luis María Sáez de Jáuregui, se ha reunido recientemente con distintos miembros del Grupo Consultivo Actuarial Europeo, celebrándose asimismo el Comité de Standards, Freedoms and Professionalism. La cita, que tuvo lugar hace unas semanas en Edimburgo (Reino Unido), sirvió para analizar las normas actuariales para considerar un estándar sobre el informe de la función actuarial (GCASP2), una propuesta para desarrollar un modelo sobre la práctica general actuarial (GCASP1), además de darse cuenta de ‘Market Consistency’, uno de los documentos publicados por el GC.

El IAE recuerda que este Grupo Consultivo “reúne a las asociaciones actuariales de la Unión Europea formando un foro de debate entre todas ellas, representa a la profesión actuarial ante las Instituciones de la UE de cara al estudio y discusión de propuestas legislativas sobre aspectos de índole actuarial, siendo el IAE una de las cinco asociaciones europeas más grandes”, entre las 35 que forman la organización, “contando el IAE con el máximo número de representantes posible para una asociación en el órgano máximo de gobierno del grupo, formando parte del mismo Luis María Sáez de Jáuregui, Hugo González y Henry Karsten”.

Asimismo, en la reunión se revisaron diferentes temas relacionados con la International Actuarial Association (IAA) y se analizó la iniciativa global de calificación ERM y CERA, de la que, recuerda el IAE, “han mostrado su interés varios institutos de actuarios en Europa (Reino Unido, Países Bajos, Alemania, Francia, Suecia y Suiza)”, así como la propia organización española. El fin es seguir avanzando en el reconocimiento del CERA en dichas instituciones.

Entre otros aspectos también se analizaron los avances en cuanto a lo relativo al Código de Conducta del Grupo Consultivo, que está siendo revisado en el seno del GC por un reducido grupo de trabajo del que forma parte el presidente del IAE. Se trata, se apunta, de una de las normas “que ayudará a asegurar la calidad del trabajo actuarial desde la perspectiva del usuario”.

(fuente: Por Redacción – 21/05/2013)