Se trata de Soberlink, un aparato que tiene un sensor que se conecta con la red de teléfonos móviles e Internet, incorporando una pequeña cámara fotográfica que permite verificar la identidad del usuario y también cuenta con un sistema GPS para registrar las coordenadas de ubicación.
El consumo de alcohol en tiempo real
La idea es que el usuario sople al menos dos veces al día -aunque pueden ser más- a unas horas previamente establecidas. En caso de que el resultado del test sea positivo, el dispositivo envía una alerta automática por mensaje de texto y correo electrónico a las personas que figuren en el llamado círculo de recuperación del paciente, revela la publicación de La Nación.
Asimismo, los datos llegan también al perfil que el usuario tiene en la página de Soberlink, donde en cuestión de 30 segundos después del test, aparece la cantidad de alcohol en la sangre y la verificación de la fotografía.
Por otro lado, desde 2012, el Dr. Gregory Skipper utiliza el alcoholímetro digital con sus pacientes en el centro que dirige en Santa Mónica, Los Ángeles y revela: “Pensé que era una idea noble que podía ser útil” y agrega que a los pacientes “les ayuda a ser conscientes de la importancia de mantenerse sobrios; de alguna manera se sienten orgullosos de sus registros”, concluye Skipper en una nota a BBC Mundo.
Por último, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, pos sus siglas en inglés) dio el pasado julio la autorización para que el alcoholímetro digital sea considerado un dispositivo médico. Esto abre muchas puertas a que pueda ser financiado por los seguros médicos.