(f) «Le entro como Salamanca al piano» La frase tiene su origen en la forma de actuación del músico Fulvio Salamanca.
Salamanca –nacido en Santa Fe en 1921 y fallecido en 1999- fue pianista, arreglador, compositor y director de orquesta. Integró la orquesta de Juan Darienzo entre 1941 y 1956. En junio de 1957 presentó su propio conjunto con el que grabó en los sellos discográficos Odeón y Music Hall. Compuso tangos memorables como «Matraca», «Tanguereando», «Carmen», «Delantal» y otras piezas.
La frase famosa tiene su origen en la forma en que tocaba el piano, destacándose por su marcación rítmica y el énfasis con el que percutía las teclas. Parecía que el instrumento no iba a resistir lo fuerte con que lo interpretaba, sin embargo el ritmo logrado y la perfección de su talento musical le dio una característica muy propia a un tipo particular de tangos. Fulvio Salamanca, sería el responsable de pulir el estilo brillante e inconfundible del piano de la orquesta de Juan Darienzo y que lo llevara a ser bautizado como “El Rey del Compás”.
De allí que el sentido de la frase tiene que ver con encarar un tema o algo en particular, con mucho énfasis, entusiasmo y fuerza.