Así lo afirmó Julián Domínguez en el 75 aniversario de FACE (Federación Argentina de Cooperativas Eléctricas).
En el auditorio del edificio anexo de la Cámara de Diputados de la Nación se llevó a cabo la celebración por el nuevo aniversario de la Federación Argentina de Cooperativas Eléctricas bajo el lema “FACE, 75 años en defensa de los principios y la acción cooperativa, iluminando un futuro inclusivo, solidario y federal”.
En el acto estuvieron presentes Julián Domínguez, presidente de la Cámara de Diputados de la Nación; Marcelo Gallo, presidente de FACE; Patricio Griffin, presidente del INAES; Ariel Guarco, presidente COOPERAR; y representantes de cooperativas de todo el país.
“En el transcurso de los últimos años el movimiento cooperativo ha ido asumiendo nuevas responsabilidades y nos ha ido ayudando a las representaciones políticas a tomar cada vez más definiciones en relación a qué modelo de sociedad queremos”, afirmó Griffin.
Marcelo Gallo remarcó el compromiso de la federación para entregar a las nuevas generaciones “un cooperativismo que sea referencia ética, al mismo tiempo que un gestor eficiente de recursos colectivos y un constructor de futuro. Ese es el cooperativismo que desde FACE queremos seguir impulsando, en nuestro 75 aniversario y siempre”. Siguendo la misma línea Guarco destacó la trayectoria de FACE y manifestó que el cooperativismo es “un modelo económico diferente, que puede dar las respuestas que la sociedad está necesitando, un modelo que puede pensar en una sociedad en una sociedad diferente, en la cual la prioridad sea el ser humano, el desarrollo y su contexto”.
En el cierre de la jornada
Julián Domínguez, afirmó que “el futuro de la Argentina es un futuro cooperativo y solidario”. Por otro lado el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación insinuó que llegará un momento en que “Argentina tendrá un Ministerio de cooperativas para que el Estado ponga todos sus recursos en potenciar un país no condicionado por los sectores económicos, en un modelo de organización que genera empleo y reinvierte su renta en el país”.
Si bien Domínguez destacó el trabajo de las cooperativas en zonas que no son rentables, planteó que el desafío para el movimiento en los próximos años es “generar las condiciones para que la organización cooperativista de los grandes grupos de prestaciones de servicios generen rentabilidad, por una sencilla razón: eso vuelve a la comunidad”.
Fuente: INAES.