El ministro dijo que ya aportó al fisco 82.000 millones de pesos por el pago de tasas que exige la operación; banqueros, economistas y analistas de impuestos son optimistas y creen que el número crecerá aún más hasta marzo.
Sólo cuatro días antes de agotar una nueva etapa el blanqueo de capitales que lanzó el Gobierno para financiar el plan de mejoras a los jubilados y ampliar la base impositiva ya lleva acumulados activos declarados por 90.000 millones de dólares y le aportó al fisco unos 82.000 millones de pesos, por las distintas multas que deben pagar muchos de los que adhieren. Los datos fueron difundidos ayer por el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, y el director de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Alberto Abad, al cabo de una conferencia de prensa que le sirvió además al funcionario para dar su versión de su salida y hacer un balance de su gestión.
Prat-Gay destacó que la cifra supera en hasta 35 veces el nivel de adhesión por apenas US$ 2595 millones que alcanzó el anterior blanqueo, convocado durante el gobierno de Cristina Kirchner (que contemplaba la compra de títulos Baade y Cedin para obra pública o infraestructura y adquisición de inmuebles y se prolongó durante 28 meses) y va camino a duplicar los montos sincerados recientemente en Brasil, «una economía mucho más grande, que con un blanqueo similar obtuvo 52.500 millones de dólares».
Se trata, según el aún ministro, de una cifra de adhesiones sin precedente para una iniciativa de este tipo, que representa un 17% del PBI argentino, o sólo en inmuebles ahora blanqueados y ubicados en el exterior «multiplica por tres el total de lo declarado por los contribuyentes en Ganancias o Bienes Personales durante 2015», valoró por su parte Abad.
«Cuando los países llevan a cabo estos ejercicios, la estimación de recaudación anda en el orden de medio punto del producto (PBI). Nosotros ya estamos duplicando eso y nos falta todavía una etapa adicional», afirmó Prat-Gay, para quien estos datos demuestran que se trata de «un éxito indiscutible». Los funcionarios reconocieron que el nivel de adhesiones creció también ayudado por el cambio en el contexto internacional. «Hay una nueva institucionalidad global en lo impositivo y la gente lo percibe», explicó Abad. La cifra representa casi un tercio del total en torno a los 300.000 millones de dólares que, según estimaciones de mercado, los argentinos tienen en el exterior.
Vale recordar que quienes adhieran antes de fin de año deben pagar un impuesto del 10% del valor del total sincerado, alícuota que subirá al 15% desde el 1° de enero hasta el 31 de marzo, cuando vence el último plazo.
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Las opciones para evitar pagar esos aranceles son destinar el dinero antes no declarado para comprar bonos o invertirlo en proyectos productivos mediante la suscripción de fondos comunes de inversión (FCI). Al mismo tiempo, quienes declaren inmuebles pagan en cualquier caso el 5%. En este sentido, Prat-Gay dijo que se suscribieron además «alrededor de 560 millones de dólares en bonos, fundamentalmente el bono más largo, el bono a siete años».
Abad, por su parte, dijo que en bases públicas habían podido rastrear «1700 propiedades de argentinos en Estados Unidos». «Les mandamos una comunicación invitándolos al blanqueo y el 70% contestó afirmativamente.» Y espera que el resto lo haga de «aquí en más».
Bienvenida
Banqueros, especialistas en temas contables y economistas recibieron de manera muy positiva el anuncio. Federico Tomasevich, presidente de Puente, enumeró casi sin pensar una larga lista de beneficios para el país. «Es un golpe de confianza que se le está dando a esta gestión en un momento crítico, porque se estaban empezando a ver algunas preocupaciones con respecto al déficit y al nivel de actividad. Esto cambia el eje de la conversación», sostuvo.
Entre los beneficios, mencionó la ampliación de la base de contribuyentes de cara al futuro, algo «sumamente positivo para la Argentina», y la emergencia de una «enorme demanda de activos financieros argentinos, porque una parte de lo exteriorizado no tenía vocación de comprar bonos o acciones locales», algo que sí podría ocurrir ahora. Sucede que los bonos, las acciones y los plazos fijos, por citar algunos ejemplos, no pagan Ganancias. «La cantidad en términos de flujos que se amplía en demanda potencial es enorme. Esto amplía la base del mercado financiero y de capitales», agregó. También pronosticó efectos positivos en la economía real.
El CEO del HSBC, Gabriel Martino, cree que más allá del efecto fiscal positivo de corto plazo la clave del blanqueo es que generará «un monto de capital que en algún momento podrá entrar al país», algo que antes no era posible. «Mucha gente que antes tenía una cartera de inversiones de bonos americanos ahora empieza a pagar Ganancias. Una parte va a comprar bonos argentinos.»
Raúl Sanguinetti, socio de Baker Tilly Argentina, estimó que el anuncio de Prat-Gay implica un piso para el blanqueo, dado que aún falta la parte destinada a los inmuebles. Cree que el éxito se debió a dos razones. La mayor es la presión internacional por declarar los fondos, a tal punto que consideró la situación actual «un momento histórico en el que la transparencia supera a la privacidad». Pero responsabilizó también a la confianza que despertó el Gobierno, dado que hace poco tiempo la administración de Cristina Kirchner intentó, sin éxito, una jugada similar. Y agregó: «Otro síntoma es que la gente quiere estar a derecho. Esto es muy relevante. Lo más importante es que esa plata que está afuera ahora se puede mover libremente. Hay que enseñar a usar los instrumentos de inversión en la Argentina, como la Bolsa, donde no hubo corralito. Hay un mundo nuevo de inversiones».
El economista Camilo Tiscornia estimó que el blanqueo le permitirá al Gobierno cumplir con sus metas fiscales. «Son unos US$ 6000 millones de recaudación extra, algo así como un punto del producto, pero hay que entender que es un golpe grande por única vez; no va a pasar todos los años. Por eso hay que ser muy cuidadosos desde el punto de vista fiscal el año próximo».
Las cifras del sinceramiento
35 Veces
Es la proporción en que el blanqueo lanzado por Macri supera al resultado de la misma operación que hizo Cristina Kirchner
560 Millones de dólares
Es el monto que ingresó a través de la compra de bonos emitidos para el blanqueo, sobre todo, el emitido a 7 años
10% Tasa
Es el impuesto sobre el monto a blanquear que deben pagar quienes ingresen hasta el viernes próximo; después, habrá que pagar el 15%