Autos usados: diez claves a tener en cuenta antes de cerrar una compra

(f) Desde los papeles hasta el estado del motor son algunas de los pasos básicos para evitar problemas una vez que se hizo el negocio y no hay marcha atrás.

«La pinta es lo de menos», dice la canción. Y la frase es clave al momento de comprar un auto usado, ya que la estética puede ser muy llamativa pero tanto el motor como los papeles son aún más importantes a la hora de cerrar el negocio.

El mercado de vehículos usados ha sufrido una caída en las transferencias en los últimos meses, reflejando lo que pasa con el de 0km. Sin embargo, el derrumbe ha sido menor, y todavía quedan algunas oportunidades para «sobrevivir».

La mayor brecha de precios que se abrió entre los 0km y los que ya tienen algunos añitos es uno de los factores a favor. Mientras que los nuevos se incrementaron 30 por ciento en el primer trimestre, producto de la devaluación ( y sin tener en cuenta el impacto del impuesto), los usados tardaron más tiempo en actualizarse.

Otro factor es la falta de créditos. Si bien el gobierno presentó el Pro.Cre.Auto, no llega a todos los sectores y ante la falta de financiamiento para llegar al 0km es común que se opte por el usado.

En este contexto, las ventas del sector cayeron 9 por ciento en el primer semestre frente al 23 por ciento de los nuevos. Y la gente trata de renovarse dentro de este sector, subiendo en modelos si no puede llegar al 2014.

Sin embargo, es fundamental tener en cuenta pequeños consejos para no realizar una mala compra y luego arrepentirse. Así, el décalogo de items a tener en cuenta es el siguiente:

1.- ¿Particular o concesionario?: La venta de autos por Internet ha ganado mucho terreno en la Argentina, especialmente a partir del éxito de algunos sitios como Mercado Libre. Sin embargo, hay que estar seguro de realizar bien la operación si es con un particular y no dejar detalles librados al azar. Muchas veces la compra en un concesionario implica pagar un poquito más o perder por la entrega de un auto propio, pero en general tiene más garantías.

2.- Verificar la tasación del vehículo: 2014 es un año especial para la Argentina. A partir del impuesto interno que afectó a los autos de alta gama, la modificación de los precios se trasladó al resto de los 0km y de estos a los usuados. Así, es muy difícil establecer parámetros reales para un usado. Por ejemplo, mientras una Honda CRV 0km vale $800.000, por una con dos años de antigüedad se pide $240.000. Cuál es la lógica? Se debe trasladar o no el impuesto? Esos son algunos de los interrogantes. Hay que estar atentos a las cotizaciones y tener en cuenta siempre alguna guía de precios como referencia, especialmente si un negocio directo.

3.- Hacer todas las preguntas necesarias: Hay que ser inquisitivo con el vendedor, y que no queden dudas sobre el vehículo. El kilometraje, cuantos dueños tuvo el auto o si lo tiene desde 0km, cómo lo han usado, el historial mecánico, si ha tenido accidentes, cuanto consume, motivos de la venta.

4.- Inspeccionar el auto: desde el aspecto exterior hasta el motor, pasando por el interior, todos los detalles pueden dar indicios sobre el mantenimiento que ha tenido y el estado actual del automóvil. Siempre es mejor verlo de día, con buena luz, cuando los defectos de chapa, pintura, neumáticos o interiores serán más visibles. Niveles de aceite y refrigerante o correcto funcionamiento del aire acondicionado darán buenas pistas sobre un correcto mantenimiento.

5.- Revisar la documentación: Es clave verificar todos los papeles del auto, desde la tarjeta verde a nombre del actual propietario, para no tener que «rastrear» al titular, hasta las patentes o verificación técnica en caso que sea necesario..

6.- Probar el vehículo: Es mejor probar el auto antes de cerrar la operación. Si bien puede verse de buen aspecto por fuera, puede detectarse alguna falla desde arriba y en movimiento. Si no tiene mucha idea de la mecánica, se puede hacer la prueba con un mecánico o llevarlo directamente a un taller.

7.- Si decide comprarlo, hacer transferencia de inmediato: Es importante que automáticamente se realicen todos los pasos administrativos correspondientes, lo que permite terminar de cerciorarse sobre la documentación y evitar futuros problemas.

8.- No se precipite: Si tiene dudas es mejor dejarlo pasar y ver otras opciones. Aunque el vendedor le presione, hay que ser objetivo o pedir asesoramiento si es necesario.

9.- Elija y clarifique bien el sistema de pago: Más allá de tener en cuenta las precauciones necesarias para entregar el dinero, hay que exigir recibo y detallar en el contrato de compra-venta cómo se realizará la operación. Estos documentos serán determinantes si surgen desavenencias posteriores.

10.- Posteriores problemas: A pesar de todas las precauciones, es posible que exista un defecto oculto en el vehículo que se manifieste después de la transacción. Si el auto se compró en un concesionario, debería haber garantías. La forma de actuar en el caso de los particulares será en primer lugar contactar al vendedor y ponerse de acuerdo en que un experto profesional valore la reparación si es un problema muy grave que se nota ya tenía el auto. Si el vendedor no se atuviese a estas razones, habrá que ver si merece una acción legal.

Fuente: Iprofesional.com