Joan Melé, referente de la banca ética europea, dice que cuando se lucha por los precios sin considerar los valores, se afecta a las personas y al planeta.
«De cómo invertir para ganar más dinero a cómo invertir para que todos estemos mejor». De eso se trata un movimiento de las finanzas en el mundo, según lo describe el catalán Joan Melé, uno de sus principales referentes. Hasta hace poco caracterizada como la «banca ética» y con origen en países europeos como Alemania y Holanda, se trata de una sector que ahora se autodenomina «banca con valores». Y la elección de la palabra no es casual: «En general hoy ya no se habla de valor sino de precios. Y ese es nuestro problema», dice el ex directivo y hoy asesor de Triodos Bank en España, una entidad financiera nacida en los años 60 con una autoexigencia: la de prestar dinero sólo a actores económicos cuya actividad sea beneficiosa para las personas y el medio ambiente.
Una de las premisas de este tipo de bancos es que hacen pública la información sobre el destino que le dan al dinero de los ahorristas, es decir, sobre quiénes reciben créditos. «El dinero es relación entre seres humanos y eso es lo que se ha perdido de vista», define Melé, que insiste en que es necesario tomar conciencia de cómo va a afectar a uno mismo, a otras personas y al planeta, la decisión que se tome respecto de qué hacer con el dinero.
La regla es válida tanto en el caso de los ahorros como en el de los consumos. «Cuando luchás por un precio y te olvidás del valor del ser humano, cuando luchás por precios competitivos, al final de la cadena alguien pagará, o con su salud o con los efectos de que se destroce al planeta. No deberíamos relacionarnos a través de los precios sino de los valores», afirma Melé, que invita a mirar, cada vez que se compra, el origen de los productos y lo que de él se cuenta en los envases.
Melé comenzó a trabajar en el banco Triodos en 2004, tras una larga experiencia en la banca tradicional. Hoy dice que ve esfuerzos en algunas entidades por tender a la transparencia: «Pero hay que distinguir a los oportunistas; si se maneja una parte de la actividad con un criterio ético y otra no, eso es oportunismo; hay bancos que sí quieren hacer un cambio. La gente joven está en un proceso de cambio, mira más los efectos en la comunidad de sus decisiones, y eso es un cambio imparable», señala.
¿De qué se trata el concepto de operar con valores? En el caso de Tríodos, ejemplifica el directivo, «no financiamos energía nuclear y sí fomentamos la energía que proviene de fuentes renovables; prestamos a la agricultura ecológica y si es posible de calidad». La visión es que son los clientes los que tienen la posibilidad de lograr que el dinero se dirija hacia determinados fines: «Los bancos tienen mucho dinero y mucho poder, pero es nuestro dinero y nuestro poder», sentencia.
«También hay cuestiones complementarias que hacen a la gestión de la empresa propiamente dicha: no hay bonus para los directivos y la diferencia de salario entre el más alto ejecutivo y quien acaba de entrar es bajísima; en nuestro caso (Triodos) es de 9,5 veces», comenta. Según agrega, la motivación del personal jerárquico está definida por la propia esencia del banco en el que trabajan.
El espacio que la banca ética ocupa en el mercado total es muy pequeño. Pero Melé dice que en varios países europeos el avance tomó velocidad en los últimos tiempos, y que en Barcelona llegaron a captar 1500 nuevos clientes sólo en un mes; «hubo que frenar el crecimiento en España; no nos daba el tiempo para invertir».
En América latina hay algunas expresiones de este movimiento en países como Perú y Bolivia. Melé, que viaja con frecuencia a la Argentina para ofrecer conferencias y liderar actividades de concientización, dice que un banco como Triodos no se instalaría en el país. «Creo que tiene que salir algo propio de acá, eso sería lo más apropiado, y la alianza global de la banca con valores estaría para apoyar».
«Hay quienes dicen que la banca ética son cuatro románticos -concluye Melé-. Pero hoy hay un cambio de exigencias por cuidar lo humano y lo ambiental. Y eso es imparable».
Fuente: http://www.lanacion.com.ar/1936443-ahorro-consciente-invertir-para-obtener-una-rentabilidad-social