La inclusión de las personas con discapacidad en puestos de trabajo está en ascenso y los empleos que se demandan son variados, entre ellos auxiliares de cocina o de recepción, empleados administrativos o de archivo y operarios. En el Día Mundial del Síndrome de Down, que se conmemora cada 21 de marzo, instituciones recuerdan que ingresar al mercado laboral es algo que cambia la vida de cualquier persona, y las que nacieron con este trastorno genético no son la excepción.
Silvina Alonso, coordinadora de inclusión laboral de la Asociación Síndrome de Down de la República Argentina (ASDRA) indicó a DocSalud.com que la inclusión en el trabajo mejora el clima laboral entre empleados, pero que la demanda por parte de las compañías es mayor a los candidatos disponibles por el miedo que tienen las familias a exponerlos.
Programas desde ASDRA y trabajo en red
Alonso relató que la asociación maneja un programa para personas con discapacidad intelectual en edad laboral, no sólo para personas con Síndrome de Down. El requisito es que los candidatos estén interesados en trabajar.
“Cuando las empresas nos contactan, realizamos un análisis del puesto de trabajo ofrecido, sus requerimientos cognitivos, motrices y el entorno social. Después chequeamos en nuestra base de datos, que incluye a personas de distintas instituciones con las que trabajamos en red, si hay algún candidato disponible con las competencias laborales necesarias para ese puesto”, indicó la coordinadora.
Además, aclaró que el empleo es siempre mediado por el apoyo de un profesional que acompaña en un primer tiempo no sólo al trabajador, sino también al entorno laboral, que a veces no sabe cómo explicar o asignar las tareas o bien corregir un error.
“Una vez que el trabajador aprende lo que debe hacer el profesional se corre del puesto, pero continúa un seguimiento, se contacta con el empleador de manera frecuente y de tanto en tanto realiza visitas”, indicó.
Leyes a iniciativas a nivel nacional
Según detalló Alonso, existe un programa que ofrece beneficios impositivos por un año a las empresas que contratan a personas con discapacidad, pero en la práctica estas compañías no toman esos beneficios, sino que hacen la contratación de forma directa.
“Las compañías que se orientan a la inclusión buscan más los beneficios sociales que los monetarios, ya que ninguno de estos trabajadores suele faltar, no llegan tarde, son responsables y mejoran el clima. Incluso algunas compañías reportan que al contratar personas con discapacidad, los otros empleados faltan menos, y hay menor rotación”, detalló.
Por otra parte, en el artículo 8 de la Ley 22.431 se indica que las empresas privadas que brindan servicios a organismos públicos deben cumplir con un cupo del 4% de contrataciones inclusivas.
Resultados en la práctica
Alonso lamentó que haya más oferta de puestos de trabajo que candidatos con Síndrome de Down para ocuparlos, tendencia que ocurre “por los miedos que depositan las familias sobre sus hijos”.
“Es recomendable que el entorno de las personas con Síndrome de Down se acerque a las distintas instituciones para conocer los testimonios de otras personas, que den cuenta de cómo el trabajo cambia la vida ”, indicó Alonso.
A su vez, destacó la importancia de que las personas con discapacidad intelectual puedan valerse por sí mismas cuando su familia no esté presente, y recordó el testimonio de uno de los trabajadores que ASDRA conectó con una empresa, “soy humano, y puedo equivocarme como todos, sólo hay que animarse”.
Por: Celina Abud
(fuente: http://www.docsalud.com/articulo/7175/contratar-a-personas-con-discapacidad-mejora-el-clima-laboral)