La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) presentó el «Mapa de la Argentina Ilegal», un documento en el que buscan demostrar el crecimiento registrado en los últimos años en lo que respecta a la actividad comercial ilegal en todo el país, que habría registrado un nivel de facturación proyectado superior a 4.300 millones de pesos solo en el mes de agosto.
El informe, que se realizó a partir de relevamiento en 454 ciudades del país que aglomeran en conjunto el 78,6% de la población total, denuncia que existen 77.909 puestos ilegales y 560 ferias tipo «Saladitas», y que, en estos últimos cinco meses, la cantidad de vendedores ilícitos creció 5,1% interanual.
La Ciudad Autónoma de Buenos Aires es el distrito con mayor nivel de puestos ilegales, seguido por Lomas de Zamora y La Matanza.
CAME prevé que la facturación total de la actividad comercial ilegal a lo largo de 2015 trepará a alrededor de 52.751 millones de pesos, lo que equivale a un 10,2% del total de las ventas registradas en el sector formal.
Esto, según la entidad empresaria, supone «un golpe muy duro no sólo al comercio legal, sino que también al Estado, ya que sólo de IVA, se pierde de recaudar más de 11 mil millones al año».
También, el estudio marca que los puestos fijos en las «Saladitas» concretaron ventas promedio en agosto por 2.795 millones de pesos, mientras que los «manteros» llegaron a los 1.601 millones de pesos.
En cuanto a la cantidad de comercios ilegales por ciudad, el informe de CAME ubica a la Ciudad de Buenos Aires como el «distrito que más sufre la informalidad», con 13.596 puestos en ferias y manteros.
Las ventas realizadas por estos puestos se ubicaron en torno a los 850 millones de pesos aproximadamente, lo que representa el 19,3% de las ventas totales informales en el país, destacándose el rubro de la indumentaria (64,8%) como el principal negocio.
A la Ciudad de Buenos Aires, la siguen los partidos bonaerenses de Lomas de Zamora y La Matanza.
Del mismo modo se detectó que Buenos Aires también es el distrito con más «Saladitas», con 125 predios y 7.470 puestos de venta.
El informe de CAME también destaca las características más llamativas del comercio ilegal. Entre ellas, resalta el crecimiento de la venta a través de las redes sociales y aplicaciones de whatsapp, así como la mayor sofisticación de las «Saladitas», el traslado de los vendedores formales y los formatos tipos saladitas o vendedores informales, entre otras cuestiones.
La presentación, en la que estuvieron presente el presidente de CAME, Osvaldo Cornide, el presidente de la Asociación Civil Antipiratería Argentina, Diego Farreras, el secretario de Relaciones Públicas e Instituciones de CAME, Fabián Castillo, y representantes de otras cámaras y funcionarios, contó también con la presencia del Senior Legal Counsel de Interpol, Stefano Betti.
Respecto a la problemática que representa el comercio ilegal en todas sus formas, Betti dijo que «a nivel global hay una conexión muy estrecha entre la violación de la propiedad intelectual, las falsificaciones y todo tipo de crimen, hasta el terrorismo» y que «los jueces y los políticos muchas veces no comprenden seriamente lo que significa» los inconvenientes que genera las ventas informales.
Betti abogó por el incremento en las penas para las personas incriminadas en este delito, aunque reconoció que «los criminales tienen mucho más miedo que le secuestren el dinero o la mercadería que a pasar un par de años en la cárcel».
Por su parte, Castillo sostuvo que «la gente que vende en la calle no es la dueña de la mercadería, está ahí por unos pocos pesos y a la noche tiene que rendir cuentas», en cuanto a la naturaleza mafiosa que entiende la CAME que posee la venta ilegal y que «todo lo que es dinero negro, va para todo lo que sea en negro», deslizando incluso que «el narcotráfico esta involucrado» en este tipo de operaciones.
A modo de cierre, Castillo dijo «no estamos en contra del artesano» sino de «los que venden cosas robadas».
(fuente: http://www.ambito.com/noticia.asp?id=808527)