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En tiempos de incertidumbre los que saben dialogar tienen trabajo asegurado
Se buscan nuevos perfiles que tienen buenas relaciones fuera de la empresa
El 2° Congreso de Gestión de Capital Humano organizado por la consultora Assitem demostró una vez más el enorme interés que existe en temas de actualidad y de Recursos Humanos.
Con una perspectiva orientada más hacia la continuidad de la incertidumbre que en certezas, la mirada de panelistas y también de quienes concurrieron al evento no dejó de expresar la sensación de que en este momento compartir experiencias es importante para evitar, en lo posible, pasos en falso.
De manera casi transversal, las relaciones con los gremios fue uno de los temas más tocados. «Hoy los puestos más importantes son los del responsable de Relaciones con el Gobierno y también el de Relaciones Laborales», dijo Isela Costantini, CEO de General Motors para la Argentina, Uruguay y Paraguay. Recomendó crear puentes con los delegados gremiales antes de que suceda una crisis, para que en una situación difícil la relación sea fluida. «Yo tengo reuniones dos veces año con los delegados de la planta. Hay que educar en la realidad del negocio, su situación financiera y rentabilidad. Siempre hay que hablar con sinceridad y honestidad. En este marco, las dos partes tienen que ceder porque las dos tienen que ganar».
El panel de relaciones laborales reunió al abogado Julián De Diego y al economista Orlando Ferreres. Este último comenzó realizando un análisis del mercado laboral privado, estancado desde 2011 y el aumento del empleo público en la Argentina para evitar la suba del desempleo. «En donde más creció es en las provincias», relató el especialista, que puso el foco en las «picardías» del Indec sobre la tasa de empleo para evitar mostrar más desocupación.
Por otro lado, De Diego anticipó más conflictividad social por el vaciamiento legal que sufrió, luego de varios fallos judiciales, la ley de asociaciones financieras que regula la actividad de los gremios. Criticó además los planes sociales y cómo funcionan para desincentivar la registración de empleados en todos los rubros de la economía.
«Nubarrones va a haber. Eso es inevitable», dijo Ferreres sobre la economía que viene y los ajustes que deberán hacerse. De Diego afirmó que cualquier ajuste futuro deberá ser gradual para evitar más conflictividad con los trabajadores y los sindicatos.
DESDE RR.HH.
El panel de Recursos Humanos demostró que ante una fuerte crisis en una empresa, es posible poner el foco en las personas, mas allá del negocio. Juan Manuel Martín, director de Recursos Humanos de Isenbeck, tuvo una fuerte experiencia en la empresa anterior en la que trabajó, que le sirvió como aprendizaje para moverse hoy en el ámbito de los Recursos Humanos.
Se trató de un proceso de reconversión de una planta productiva y centro de logística en Misiones, donde trabajaban 270 personas. «Esto fue un entrenamiento de alto desempeño, en el que se trabajó durante casi siete meses antes de la intervención con un equipo de profesionales que incluyó trabajadores sociales y especialistas en outplacement o reconversión laboral. Durante ese período se buscó conocer las inquietudes y expectativas de la gente, que siguió infinidad de trayectos diferentes: unos quisieron retirarse, otros armar microemprendimientos, otros estudiar…»
Esta acción, según el profesional, marcó su rumbo en la manera de gestionar a las personas. «Si hoy tengo que hacer un cambio, quiero conocer las expectativas de la gente. No es algo que se pueda dar de manera unilateral. Si la gente participa e interviene, se logra finalmente el compromiso.»
Hernán Valcarce, director de Recursos Humanos de Danone, se refirió al sentido de propósito de las personas dentro de una compañía. «Cada persona necesita un propósito, algo que le dé sentido a sus acciones. Las organizaciones también lo necesitan, ya que con un propósito compartido sus colaboradores son capaces de alcanzar resultados asombrosos», escribió en un editorial del newsletter de la empresa, una línea de pensamiento que estuvo muy presente durante el panel de Recursos Humanos.
«Un objetivo puede cambiar con las circunstancias, mientras que un propósito es mucho mas profundo y duradero. Nos da una dirección, nos focaliza en lo importante, nos da pasión y energía, nos vuelve confiables porque nos hace transparentes.»
Finalmente, Alejandro Melamed sintetizó cuál es la clave del éxito: es la intersección entre excelencia y valores. Se trata de pensar, sentir y hacer en sintonía.
Por Paula Urien | LA NACION
Lectura sugerida por Presidencia del CA – Muchas gracias María Belén Gomez por aportarla.
