El Banco Central de Brasil decidirá en los próximos días sobre los nuevos términos de su programa de swaps cambiarios para el próximo año, extendiendo su intervención en los mercados externos para contener la fuerte depreciación del real brasileño que ha impulsado a la inflación.
El presidente del Banco Central de Brasil, Alexandre Tombini, reiteró el martes que el programa de intervención cambiaria del banco ha cumplido con sus metas y que la actual reserva de swaps ha satisfecho la demanda de protección financiera de los empresarios.
Los comentarios de Tombini plantearon dudas sobre la continuidad de la intervención cambiaria del banco en el 2015. Sin embargo, Tombini aclaró que el banco está decidiendo actualmente los nuevos términos del programa que entrará en efecto el próximo año.
Sus comentarios no fueron suficientes para aliviar la preocupación de los inversores. El real se debilitó más después de que habló, casi un 2%, a 2,781 unidades por dólar debido a que el mercado esperaba más detalles sobre el programa que actualmente vende swaps por 200 millones de dólares diarios.
En declaraciones posteriores, Tombini afirmó que el banco podría reducir su oferta diaria de swaps cambiarios hasta 50 millones de dólares o dejarla en sus actuales 200 millones de dólares.
Una fuerte caída en los precios globales de las materias primas y perspectivas de tasas de interés más altas en Estados Unidos el próximo año han puesto una enorme presión en las monedas de naciones emergentes en los últimos meses.
El rublo se hundió más de un 11% frente al dólar el martes, en su mayor caída intradiaria desde la crisis financiera rusa de 1998, debido a que la confianza en el banco central ruso se evaporó tras una ineficaz alza de tasas.
Tombini reiteró que el Banco Central no será complaciente con la inflación, que debería llegar a su máximo nivel en el primer trimestre del próximo año, pero que entonces iniciaría un «largo período de declive» hacia el centro de la meta oficial del 4,5%.
El banco central aumentó su campaña de endurecimiento monetario con un alza de 50 puntos básicos el 3 de diciembre, en un intento por reducir una inflación mayor al techo de la meta oficial y fortalecer los esfuerzos de la presidenta Dilma Rousseff por aplicar políticas más amigables con los mercados.
La fuerte depreciación del real, que el martes tocó mínimos niveles en 10 años, es citada por el Banco Central como uno de los principales motivos de la aceleración de la inflación.
Fuente: Ámbito Financiero (http://ambito.com/noticia.asp?id=771543)