(f) Benjamín Toselli, de IT Hunter, sostiene que son varios los factores con los cuales una jefatura debe convivir y controlar para lograr una gestión exitosa.
Día tras día, los actuales ejecutivos y jefes que se desempeñan en las organizaciones deben enfrentar retos para avanzar y alcanzar los objetivos planteados.
Así lo destaca Benjamín Toselli, presidente ejecutivo de IT Hunter, quien sostiene que hoy son varios los factores con los que un jefe debe convivir y controlar para lograr una gestión exitosa.
«Hoy estamos en un mundo cambiante y complejo que se transforma permanentemente. Esto genera una serie de retos para quienes se encuentran en puestos de poder en una compañía. La velocidad para adaptarse a los cambios, por ejemplo, resulta crucial para sobrevivir y seguir vigentes. Esto último es válido tanto para las personas como las organizaciones», sostiene el directivo en diálogo con América Economía.
Entre los elementos a tomar en cuenta, Toselli menciona los siguientes:
1. Globalización
Los altos niveles de competitividad, el desarrollo de las tecnologías y la integración de las economías ha transformado el mundo en una verdadera aldea global, en donde cada mercado puede influir o ser influenciado por el resto.
Tal situación ha quedado en evidencia con las crisis económicas que han tenido lugar en las últimas dos décadas en el planeta. A ello se suma la diversidad cultural, hecho que se traduce en que cada vez en las organizaciones hay una mayor presencia de trabajadores extranjeros. «Entonces las jefaturas deben tener en cuenta este nuevo escenario y estar atentos a las señales de la economía.
Asimismo, deben entender las diferentes culturas y costumbres de los países para relacionarse de mejor forma con los trabajadores que son de otras nacionalidades», explica Benjamín Toselli, presidente ejecutivo de IT Hunter.
2. Inglés
Relacionado con lo anterior, los jefes modernos deben comprender que el idioma de los negocios es el inglés. Dominar esa lengua es clave para proyectarse como profesional y para proyectar la empresa en el extranjero. «Además, está comprobado que un trabajador puede percibir hasta 30% más de sueldo si es bilingüe», afirma el directivo.
3. Énfasis en los resultados
Esta mayor competencia de la que somos testigos se ha traducido, por ejemplo, en que los esfuerzos de una organización se centren más en los resultados que logre cada trabajador y no tanto en la cantidad de horas que pasa en su puesto de trabajo.
«En este sentido, los ejecutivos y jefes actuales deben fomentar conductas orientadas a las metas, mostrar altos niveles de flexibilidad y contribuir a que existan las condiciones necesarias para que cada empleado cumpla con sus objetivos».
4. Especialización
Dada la cantidad de información que se genera día a día, en comparación a lo que sucedía a fines del siglo pasado, cada vez es más frecuente observar océanos de datos que nos inundan y que, en muchos casos, nos confunden. «Frente a esta realidad, se está notando una mayor tendencia hacia la especialización entre los profesionales, como una forma de enfrentar mejor esta avalancha de data y ser más competitivos en el tiempo».
5. Colaboración
Los avances tecnológicos han ayudado a que en las organizaciones penetre con fuerza el concepto de colaboración y de equipo. De hecho, hay un sinfín de plataformas tecnológicas que permiten que el trabajo colaborativo sea una realidad y aumente la productividad de los empleados. «Lo importante es que los jefes de hoy generen las instancias necesarias para que sus empleados se conozcan y aprendan a trabajar en equipo, independientemente del área a la que pertenecen, pues son múltiples los beneficios que genera la sinergia», sostiene Toselli.
6. Liderazgo
Las organizaciones están siendo cada vez más horizontales. Hoy la apuesta está en una mejor comunicación y menos niveles organizacionales que entorpezcan los procesos. «De ahí que el liderazgo que ejerzan los jefes y ejecutivos debe orientarse a sacar el mejor provecho de cada colaborador, facilitando una política de puertas abiertas y de confianza recíproca».
7. Selección de buenos profesionales
El recurso humano es clave para el éxito de los proyectos que lideran las jefaturas actuales.
8. Retención de talentos
Los ejecutivos y jefes deben establecer barreras de salida, para evitar que los profesionales formados en la organización emigren, lo que se traduce en una fuga importante de activos intelectuales, que va en directa relación con los resultados de la empresa.
Fuente: Iprofesional.com