(f) Olvida la imagen del típico líder abotonado en un traje gris, caminando con paso decidido portando un maletín de piel en la mano. Hoy en día, los líderes sobresalientes vienen en todos los tamaños y formas.
Puede ser una estudiante de mercadotecnia vestida con jeans que dirige su propia y exitosa empresa de e-commerce; o el canoso y descalzo Steve Jobs presentando un nuevo dispositivo en una importante conferencia de la industria.
“Nuestro estudio demuestra que lo que realmente importa es que los líderes sean capaces de crear entusiasmo, de empoderar a las personas, generar confianza e inspirar a la gente que los rodea”, dice Peter Handal, director de Dale Carnegie Training, una firma de entrenamiento en liderazgo.
A pesar de lo diferente que son los líderes actuales, existen ciertas cosas que los mejores líderes hacen todos los días. Aquí Handal comparte estas cinco claves para un liderazgo efectivo:
1. Enfrenta retos
Los grandes líderes son lo suficientemente valientes para enfrentar situaciones retadoras y lidiar con ellas con honestidad. Ya sea superar algún obstáculo en la empresa o batallar por llevar a un empleado hacia el buen camino, los líderes efectivos aceptan estos retos abiertamente. Tener comunicación regular con tu equipo, informarlos de las buenas y malas noticias, así como la manera en que la empresa está reaccionando ante estos retos hará que los empleados sientan que confiaste en ellos y que no tendrán sorpresas desagradables.
“El chisme en la máquina de café es generalmente 10 veces peor que la realidad”, dice Handal. “Los empleados necesitan ver a sus líderes allá afuera, confrontando la realidad”.
2. Gana confianza
Los empleados son más leales y entusiastas cuando sienten que trabajan en un ambiente dirigido por personas en las que confían. Es posible construir esa confianza de diversas maneras; la primera es mostrando a los empleados que te importan, dice Handal. Demuestra interés en tus empleados más allá de la oficina. Deja que tus empleados sepan que estás interesado en su éxito y discute con ellos sus caminos profesionales regularmente.
Cuando un empleado comete un error no los reprimas o corrijas con enojo. En lugar, calmadamente explica la situación y por qué su comportamiento y acciones no fueron correctas, así como lo que esperas de ellos en el futuro. Cuando las personas saben que no vas a regañarlas y que tienes buenas intenciones, confiarán en ti.
3. Sé auténtico
Si no eres un traje, no intentes serlo. Los empleados y cualquier otra persona relacionada con tu empresa podrá notar si estás fingiendo ser algo que no eres, dice Handal. Eso puede hacerlos cuestionarse qué más en ti es falso. ¿Tienes una pasión por los zapatos de moda? Póntelos. ¿Eres un buen presentador y te gusta contar chistes? Hazlos reír. Usa tus fortalezas y características de personalidad para desarrollar tu estilo de liderazgo único.
Los empleados son más leales y entusiastas cuando sienten que trabajan en un ambiente dirigido por personas en las que confían.
4. Gana el respeto
Cuando te conduces de manera ética y ejemplificas las cualidades que quieres ver en los demás te ganas el respeto de aquellos que te rodean. Los líderes que son percibidos como que no “pregonan con el ejemplo” normalmente no llegan demasiado lejos.
Esto contribuye a que los empleados sientan orgullo por la empresa, algo esencial para conseguir su lealtad. Asimismo, los consumidores estarán menos dispuestos a hacer negocios con una empresa si no respetan sus valores o liderazgo.
5. Mantente curioso
Los buenos líderes se conservan intelectualmente curiosos y tienen un compromiso permanente con el aprendizaje. Son inquisitivos y siempre están buscando nuevas ideas e información. Handal dice que los mejores líderes entienden que la innovación puede surgir de diferentes lugares y constantemente buscan conocimiento o personas que puedan darles una ventaja.
“Los líderes más exitosos que conozco son personas verdaderamente curiosas. Están interesados en las cosas alrededor de ellos, y eso contribuye a su visión”, afirma Handal.
Fuente:soyentrepreneur.com
(fuente: Management Journal Newsletter Edición 222)