Las siete personas más importantes de la oficina

De las relaciones con el jefe, compañeros de trabajo y otros personajes de la oficina dependen la felicidad de uno y la probabilidad de conservar el puesto. Dentro de esa colección de relaciones hay un puñado que puede ser particularmente importante. A la hora de cultivar las relaciones de trabajo es importante prestar atención a estos siete roles clave.

El cónyuge laboral 

«Es la persona a la que se recurre en momentos de ansiedad, con quien uno toma un café y le advierte que uno tiene comida en los dientes», dice Marc Cendella, CEO de la plataforma de búsqueda de empleo The Ladders. Los esposos del trabajo intercambian consejos, alivian la tensión y se ayudan a avanzar, mientras construyen una relación de confianza de ocho o más horas por día, que puede llegar a ser más tiempo que el que se comparte con su mujer o marido real. Cerca del 70% de los profesionales de empresas dice tener un cónyuge en el trabajo, según la encuesta reciente de Captivate Office Pulse.

La secretaria

«Tiene el poder de ponerlo en la agenda de la gente que necesita para reuniones cruciales, firmas y otros propósitos», dice Marc Prosser, cofundador del sitio para pymes FitSmallBusiness.com. «Antes a este rol se lo llamaba «secretario» o «asistente ejecutivo». Hoy le corresponde al jefe de la oficina o de personal», dice Prosser. Es importante estar atento a quién controla las agendas, de modo formal o informal, de la gente clave y cultivar esas relaciones.

Los del directorio

«Si la empresa tiene un directorio y se tiene la oportunidad, es bueno conocerlo. Pero también sirve desarrollar un directorio propio», dice Christine Mann, presidenta de la firma de asesoramiento de ejecutivos Mann Consulting. «Siempre recomiendo desarrollar y sostener su propio directorio para que lo ayude a navegar las aguas de su trabajo y su vida real», dice.

«En la oficina esto puede incluir un mentor, el modelo de rol que ejemplifica adónde se quiere llegar en la carrera, y tiene la voz de la experiencia», suma. Otro puede ser «el asesor» que lo ayuda a encontrar soluciones. Cuestiona sus ideas y actúa como caja de resonancia, dice. Los «miembros de su directorio» de la oficina son personas que ayudan con sabiduría y orientación para avanzar la carrera.

El gurú tecnológico 

«Es quien sabe el truco de las direcciones de IP que empiezan con 192», dice Jim Jacobs, presidente de la consultora Focus In Site. Ayuda cuando se traba la impresora o necesita acceder a datos de otro sitio. Tener una buena relación es fundamental: va a llegar el día en que su ayuda sea indispensable.

El historiador

Otro actor clave en la oficina es el «conservador del conocimiento institucional», dice Prosser. Esta persona puede estar en cualquier nivel, desde el recepcionista hasta el CEO, pero ha estado con la firma lo suficiente como para saber por qué las cosas son como son. «Es capaz de transmitir la historia y el contexto como nadie más», agrega. A menudo hay que aprender a hacer las preguntas adecuadas para obtener información del historiador, que puede no advertir que otros no tienen su mismo nivel de experiencia.

El callado

«Otra fuente de información útil es el callado, el empleado de tono menor, posiblemente introvertido, que conoce el valor de tener la boca cerrada y los ojos abiertos», dice Cendella. «Escuchar es una fuente de fortaleza en cualquier lugar de trabajo y es valioso para comprender a colegas y líderes», dice. Contar con alguien así en el círculo de gente de confianza y contactos en el trabajo podría rendir inteligencia.

El protegido

«Usted no tiene que ser el apadrinado en una relación de apadrinamiento para obtener beneficios», dice Cendella. Se puede contar con un protegido propio. «Es alguien que demostró curiosidad intelectual, que pide más responsabilidad y que piensa más allá de las tareas que le dan», dice Cendella. Éstas son las características clave de un empleado que puede ser tomado bajo el ala de un jefe y preparado para crecer en su carrera y su cargo en la compañía. Además de darle la oportunidad de devolver parte de lo que ha recibido de quienes lo apadrinaron a lo largo de los años.

Fuente: La Nación