El especialista en gestión estratégica del talento de la Universidad de Dublín será conferencista principal de un simposio de la Escuela de Negocios de la UNSAM.
A pesar de que la gestión del talento aparece como una prioridad en la agenda de la alta gerencia, la mayor parte de los líderes de las organizaciones reconocen que la función de recursos humanos “no está equipada” para llevarla a cabo. Así, “la gestión de talento está poco desarrollada en la mayoría de las organizaciones”, sostiene David Collings, profesor de Dublin City University, editor senior del Journal of World Business y autor de numerosos papers sobre gestión estratégica.
En su primera visita a Sudamérica, Collings tendrá a cargo la conferencia principal del I Simposio “Los desafíos de la gestión del talento” organizado por la Escuela de Economía y Negocios de la UNSAM el próximo miércoles.
–¿Cómo define la gestión estratégica del talento?
–Desde nuestro punto de vista, este tipo de gestión tiene tres componentes. El primero es comprender qué posiciones en una organización son centrales para su estrategia. Lo que diferencia a estas posiciones es que un cambio en la calidad de los empleados que las ocupan llevará a un incremento significativo en los resultados. La investigación muestra que hay muchas posiciones en las organizaciones en las que un empleado destacado generará muy poco valor agregado, ya que son posiciones restringidas por procedimientos operativos. El segundo elemento de nuestro enfoque es el grupo de talentos: se trata de mirar lo que una organización espera ser a futuro, cuáles son sus requisitos clave en términos de los conocimientos y habilidades y cuántos empleados con ese conjunto de habilidades es probable que necesiten. El “grupo de talentos” implica la identificación de individuos de alto rendimiento, con alto potencial y cuyo comportamiento está alineado con los valores de la organización, un factor importante que ha sido subestimado, según mi experiencia. La etapa final de nuestro enfoque es pensar en el sistema de recursos humanos que apoya a los que están en el grupo de talentos. Nuestra experiencia sugiere que las organizaciones no hacen suficiente foco en esta propuesta. Es muy importante que todos los empleados sean bien tratados desde el punto de vista de los recursos humanos. Sin embargo, si usted tiene un 10% adicional del presupuesto ¿qué hace con él? Puede repartirlo entre todos o invertirlo en el grupo de talentos o en los roles críticos para generar el mayor retorno.
–¿Cuáles son los desafíos para desarrollar esta gestión estratégica?
–Mientras que los CEO y los líderes de RR.HH. comparten la agenda del talento, fallan al desarrollar una comprensión compartida de lo que significa su gestión dentro de la organización. En consecuencia, es difícil ir más allá de la retórica. Por otra parte, RR.HH. todavía no desarrolló su potencial como socio estratégico en la mayor parte de las organizaciones. Una investigación de la Universidad de California Sur confirma que RR.HH. destina menos del 15% de su tiempo a temas estratégicos. Por último, y en relación con lo anterior, la función de RR.HH. sigue siendo vista como un costo en lugar de como un generador de valor. Para mí, una limitación clave en esto ha sido el fracaso en desarrollar métricas y analíticas de valor sobre el rol de RR.HH.
–¿Estos desafíos también se aplican a empresas de nuestra región?
–Creo que estos temas no son específicos de un país y los veo globalmente, con variaciones de grado. Por supuesto, hay tópicos que emergen en diferentes países relacionados con la disponibilidad de talento y habilidades en áreas que son importantes para la economía.
–¿Cómo afecta la movilidad a la gestión del talento?
–Muy pocas organizaciones hacen un trabajo efectivo para integrar la movilidad global con el talento global. La evidencia muestra que cuando alguien vuelve de una asignación internacional tiene un 20% de chance de irse de la compañía al segundo año de haber vuelto.
Fuente: http://www.ieco.clarin.com/management/gestion-talento-desarrollada_0_1681032056.html