El presidente de la Asociación de Aseguradores de Chile (AACH), José Manuel Camposano, fue el invitado del octavo capítulo del programa Foro Liderazgo de El Mostrador. El dirigente gremial destacó que el mercado asegurador no ha dado muestras de decrecer pese a las catástrofes naturales y al escenario de desaceleración que afecta al país. De hecho, recordó que el año pasado la tasa de crecimiento de los seguros de vida creció 17%, cifra que llegó a los 6,3% en los seguros generales. “En una economía que está en una situación de frenazo, esta es una industria que sigue teniendo tasas muy importantes», afirmó.
Camposano explicó que lo que hacen las aseguradoras es “mitigar financieramente los costos que surgen cuando un riesgo se gatilla, para lo cual existen seguros para empresas en casos de incendio, terremoto etc. Pero a su juicio los más importantes son los que tienen que ver con las personas. “Nuestra principal contribución es resarcir las pérdidas financieras que ocurren con los riesgos de la pérdida del ingreso. La gran mayoría de nosotros vive de un ingreso, vive de un sueldo y hay eventos que hacen que uno pierda la capacidad de generar ese ingreso. Uno de ellos es la muerte, otro es la invalidez, la cesantía, temas de salud, la vejez. Entonces la pregunta es cuando ocurren esos eventos, ¿cómo puedo mantener mi estándar de vida, mi calidad de vida si no voy a percibir ingresos?”
“Para eso hay una solución, que son los seguros de vida, que te garantizan que vas a seguir percibiendo tu sueldo cuando se gatillan estos eventos», agregó el directivo, que afirmó que la industria local se ganó el reconocimiento internacional después del devastador terremoto y tsunami del 27 de febrero de 2010, cuando en sólo 10 meses ya se había liquidado el pago de prácticamente todos los seguros personales comprometidos y gran parte de los de empresas. Y para ello el desembolso fue de alrededor de nueve billones de dólares.
“Fue la catástrofe más grande para los seguros, nos vimos enfrentados a una situación al día siguiente del terremoto que debíamos pagar tres veces toda la prima anual de toda la industria, o sea, en términos proporcionales esta catástrofe para la industria chilena, fue 10 veces mayor que la principal catástrofe que había ocurrido a la industria de seguros en el mundo y para eso existían los mecanismos, existían los reaseguros, nadie dejó de pagar”.
Finalmente, consideró positiva la irrupción de actores internacionales a un mercado que lo disputan 64 compañías. “En un país catastrófico yo creo que el hecho de que existan empresas internacionales aporta valor a la industria y le da más competitividad también», señaló aludiendo a casos como el de la propia CHILENA CONSOLIDADA, que fue adquirida por el grupo ZURICH.
(fuente: BDSAL – 6/7/16)