La nueva modalidad entró en vigor hace dos meses, pero no hay interés por parte de las aseguradoras, que no están conformes con la norma. La Susep evalúa el caso
El pasado mes de abril entró en vigor una nueva modalidad del Seguro Popular en lo que supone el segundo intento de crear un seguro de Automóvil más barato (hasta un 30%) con el objetivo de aumentar el número de propietarios de vehículos cubiertos, solo que las aseguradoras no se están interesando en este seguro que, en realidad, según alegan, no está siendo ofrecido ya que falta un acuerdo entre compañías de seguros y fabricantes de automóviles, motivo por el que la Susep está estudiando cambios en la medida.
Según la nueva norma, el coche puede ser reparado con piezas originales usadas o seminuevas, procedentes de empresas de renombre que se encarguen del desmontaje de coches, y siempre con el conocimiento del cliente, entre otros factores que deberían abaratar el coste. Este requisito no gustó a las aseguradoras, que reclaman que en el mercado no existen piezas usadas de calidad para hacer las reparaciones.
Las compañías entienden que las nuevas reglas no dan el subsidio necesario para reducir los valores y quieren que se libere también el uso de piezas de fabricación independiente. Más aun así, estiman que el descuento en relación al seguro tradicional podría ser de apenas el 15%, en función de las coberturas incluidas.
Las reglas definidas por la Susep en marzo determinaban que, en el seguro popular, la empresa puede realizar reparaciones a vehículos con piezas de repuesto o recondicionadas, compradas a empresas autorizadas que se dedican a desmontar vehículos, si bien esas piezas tienen que ser originales de fábrica.
Esa exigencia acabó quitando el interés de las aseguradoras. La Confederación Nacional de Seguros Privados dijo que el seguro popular no fue ofrecido porque no hay un número suficiente de piezas de repuesto para abastecer el mercado de seguros. La propuesta de las empresas es permitir la utilización también de piezas nuevas, pero de otros fabricantes, del mercado alternativo, que son similares a las originales, pero más baratas.
Es por ello que la Susep ha indicado que considerará cambiar la determinación del uso de piezas de “segunda mano”, aunque señala que será después de julio ya que depende del aval del Consejo Nacional de Seguros Privados (CNSP), informa CNseg.
La flota de automóviles en Brasil se ha más que reduplicado en diez años. Actualmente hay más de 60 millones de vehículos circulando en las calles, pero la gran mayoría son motoristas sin garantía de reembolso o de reparación al vehículo en caso de accidente: sólo el 30% (17,5 millones) está asegurado.
(fuente: BDSAL – 28/6/16)