Los emprendimientos tienen frecuentemente oportunidades para dudar de ellos mismos, de sus planes, ideas y habilidades. A lo mejor ocasionalmente te has preguntado “¿Estaré hecho para esté trabajo?” o “¿Voy por el buen camino?”.
En 1998, fui despedida de una posición prominente en relaciones públicas en un reconocido hotel en Palm Beach en Florida. En lugar de buscar otro trabajo, decidí comenzar mi propia compañía, la Escuela de Protocolo de Palm Beach.
Al comienzo, tuve mis dudas. Me cuestionaba de manera recurrente si había tomado la decisión correcta y si es que debía obtener un segundo trabajo para sustentar mis ingresos. Estaba corta de dinero y de paciencia. Me tomó casi cinco años lograr una ganancia. Ahora agradezco haber continuado. He tenido mi compañía por 17 años y ahora mi negocio está más fuerte que nunca.
Es importante aprender cómo manejar el estrés en momentos de duda extrema para poder alcanzar tus metas. Aquí hay cuatro tips útiles que te permitirán sobre llevar la duda cuando te ataque:
1.No te compares con otros
La tentación de comparar tu negocio con otros en tu industria es difícil de ignorar. Trata de no compararte de manera poco realista o injusta que pueda causarte dudar en tus habilidades. Preocuparse sobre que están haciendo tus competidores solo es una pérdida de tiempo y puede dejarte ansioso y cansado.
En lugar de eso trata de armar redes y aprender del éxito de otros. ¿Qué hicieron bien? ¿Qué desafíos tuvieron que sobrepasar? Una gran forma de intercambiar ideas e impulsar a otros es unirse a un grupo de genios. O contratar un guía de negocios o agendar llamadas semanales con un mentor, alguien a quien puedas admirar y en quien confiar.
Cualquier emprendedor te dirá que empezar un negocio es uno de los caminos más difíciles que una persona tiene que elegir. Toma una cantidad extrema de trabajo y dedicación llevar cualquier idea desde la mente hacia el mercado.
Habrá días buenos y días malos. Además, en cierto pinto, te darás cuenta que no puedes satisfacer a todo el mundo todo el tiempo, sin importar que tanto trates.
Si sientes que te quieres rendir, toma un paso hacia atrás. Reconoce lo que ya has logrado. Muestra gratitud por haber logrado oportunidades excitantes y experiencias positivas. Manten un diario abundante de tus victorias record; sin importar que tan pequeñas sean. Cuando encuentres un obstáculo en el camino, podrás mirar hacia atrás y recordar por qué elegiste esta carrera en primer lugar.
Manejar un negocio requiere tomar cientos de decisiones. Cada decisión que tomes tendrá consecuencias; algunas positivas y otras negativas.
Cuando se encuentran con piedras en el camino, muchos emprendedores sufren de parálisis en sus análisis. El mismo feedback que han solicitado a clientes, colegas o mentores ahora dificultan su capacidad de tomar una decisión final y seguir adelante. Pueden sentirse sobrepasados por las variadas opiniones y se pueden congelar ante las dudas.
El éxito de un negocio está determinado por la culminación de muchas decisiones pequeñas en el largo plazo. Manejar un negocio exitoso es parecido a una maratón, no una carrera corta. Si en cierto punto tomas una decisión incorrecta, siempre puedes corregirlo.
Por lo que comprométete con acciones de cierto tipo y haz correcciones en el camino. Mientras más proactivo seas más confidente te sentirás en tu capacidad de liderar una compañía.
La ansiedad generalmente encuentra su raíz en el miedo. Los errores son inevitables. No importa que tan talentoso seas o que tan duro trabajes, cometerás errores ocasionalmente. Algunos errores son fáciles de corregir mientras que otros toman un tiempo y dinero considerable de corregir.
De cualquier forma, los errores te harán más sabio, un hombre de negocios más cuidadoso. La gente exitosa acepta el error como parte del camino hacia el éxito. En lugar de obsesionarte con los problemas, enfócate en las soluciones.
Si cometes un error, no cubras o tergiverses lo que pasó. En lugar de eso, admítelo lo antes posible. Cuando te haces dueño de tus errores, desarrollas una reputación profesional de confianza y veracidad. En lugar de fijarte en cada paso en falso, simplemente asume la responsabilidad, aprende de ella y encuentra la manera correcta de abordarlo. Luego sigue y déjalo ir.
Artículo original escrito por Jacqueline Whitmore, columnista y CEO de la Escuela de Protocolo Palm Beach.
Por José Antonio Camacho •
Visto en Entrepreneur.
(fuente: http://www.accionpreferente.com/estrategia/4-formas-de-sobrellevar-la-desconfianza-en-uno-mismo/)