Entrevista al superintendente de Seguros de la Nación, Juan Bontempo.
El funcionario expresó que la agenda de este año girará en torno a lo pautado en el marco del Plan Nacional Estratégico del Seguro (PlaNeS) 2012-2020. A su vez, destacó el potencial del seguro agropecuario a través del acuerdo con el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, el desarrollo del programa “El seguro va a la escuela” y el avance en el ámbito normativo. El superintendente también resaltó la relación del organismo que representa con entes de contralor de otros países de la región y se refirió al movimiento de empresas del mercado, al sector de reaseguros y a las relaciones técnicas, entre otros temas.
«Nuestra hoja de ruta es PlaNeS. Detallé casi 100 medidas durante mi exposición en el encuentro con el mercado del miércoles 18 de marzo. Me parece que la agenda del organismo está planteada en esos puntos. Hacer crecer la actividad, controlar cada vez mejor y resguardar el interés de los asegurados. Con esos ejes, disparamos la acción en todas las áreas del plan estratégico, que es la agenda para este año”, manifestó Juan Bontempo, superintendente de Seguros de la Nación, en diálogo con Todo Riesgo.
El superintendente subrayó que una cuestión importante es “poder avanzar este año con el marco normativo. Estamos esperando la definición del Ministerio de Economía para que nos devuelva el borrador y ver qué es lo que quieren cambiar y qué es lo que quieren que quede”. A su vez, agregó “la importancia de la relación que estamos generando con las Superintendencias de América Latina. Recibimos a fines de marzo al superintendente de Brasil porque quieren incorporar el plan estratégico y el inciso k como una política, a la vez que el superintendente Gabriel Wolf viajó a Perú a hablar también sobre el plan estratégico. También es importante todo lo que tenga que ver con políticas para productores”.
Agro
– ¿Cuáles son los proyectos en materia de seguro agrícola?
– Respecto del seguro agrícola, firmamos el año pasado un convenio con el Ministerio de Agricultura para desarrollar un plan de riesgo agrícola, que es la primera vez que es tomado por un Gobierno como agenda. Se trata de lograr una visualización integral del tema del riesgo. No es sólo pensar en seguros, sino también en la tecnificación para medir mejor el riesgo y tener políticas de prevención. Esto incluye desde la capacitación a los productores hasta la radarización de sectores de la Pampa Húmeda para trabajar el tema de la medición del daño y tener también información para prevenir el riesgo.
Dentro de ese esquema, empezamos a trabajar puntualmente con el Ministerio de Agricultura en lo que es el seguro. Y ahí se está analizando cuál es el mejor seguro para cada actividad. Agricultura abandonó la idea del multirriesgo, que fue lo que se había planteado hace dos años, y está avanzando en una visión regional con la definición de los riesgos puntualmente para cada región. Hoy estamos en una etapa de evaluación de la mejor oferta en términos de seguros para cubrir los diferentes riesgos que tienen las provincias. Para fines de abril, se está haciendo una nueva jornada con el ministerio. La primera fue el 10 de marzo, cuando se convocó a los ministros de Producción de todo el país para identificar los riesgos provinciales y ahora se va a avanzar en otra jornada con todo el sector asegurador para, a fin de año, tener definido sobre qué productos avanzará el ministerio, que pondrá financiamiento para que el mercado asegurador defina productos. Cuando una compañía de seguros comienza a pensar el desarrollo de un nuevo producto, lo hace con sus equipos. Lo que hará el Ministerio de Agricultura es financiar la generación de nuevos productos para el sector agrícola. Eso es inédito porque ya no es la voluntad que tenga una aseguradora de desarrollar un producto, sino que aquí hay un Estado que dice que le interesa que esto esté y que se desarrolle un producto que tenga que ver con las características de la Argentina. Lo que hará el Ministerio de Agricultura es poner financiamiento a disposición para el desarrollo de productos porque no es lo mismo asegurar en la Pampa Húmeda que en Cuyo o en el Litoral.
Educación
– ¿Qué novedades hay respecto del avance del programa “El seguro va a la escuela”?
– El Ministerio de Educación declaró de interés educativo el programa “El seguro va a la escuela”, que tiene dos etapas. Una en la que se elaboró material pedagógico de muy buena calidad, que fue presentado el 18 de marzo. Y la otra etapa es poder poner ese material como parte de los programas de formación docente que tiene el ministerio. No sólo vamos a poder hacer la experiencia de ir a escuelas con los productores, sino que el ministerio va a incorporar este material para que sea trabajado por los docentes en las escuelas. Estructuralmente, el sector va a crecer en la medida en que haya más cultura aseguradora. El docente tendrá el material y la formación para enseñar como un elemento extracurricular la temática del seguro, tanto en la escuela primaria como en la secundaria, tal como se trabaja el tema de educación vial en las escuelas. Este es un paso fundamental. En Pakapaka hay un personaje que se llama Zamba, que enseña las materias de nivel primario con una mirada histórica y lúdica. Logramos incorporar, a través de un acuerdo con el canal y la productora, que Zamba incorpore elementos del seguro y que hable de este tema, así como habla de la historia argentina. En los cines, además, habrá cortometrajes sobre nuestro tema.
Operadores
– Como organismo de control, ¿reciben consultas de nuevos operadores que quieren ingresar en el mercado? ¿Hay movimiento en ese aspecto?
– Es impresionante. En este momento debe haber cerca de seis compañías que están en proceso de formación y también hay reaseguradores interesados. En el caso del reaseguro, hubo un gran crecimiento al comienzo de la reforma. Ahora se está viendo un nuevo interés para operar en vida y patrimoniales. Se trata de nuevas aseguradoras, generalmente de capitales nacionales.
– ¿Y en cuanto a la compraventa de paquetes accionarios?
– Yo creo que se está advirtiendo una perspectiva de crecimiento del mercado y me parece que habla de la salud que tiene el sistema. No veo un proceso de gran concentración porque el que se corre de un lado avanza en otro y, además, el paso se va abriendo a nuevos jugadores.
Reaseguros
– ¿Están satisfechos con la marcha del mercado de reaseguros?
– En 2011, cuando aplicamos la reforma, había un gran escepticismo. Creemos que no fracasamos, que hoy el sector está consolidado. Hay casi 30 operadores que están trabajando. Lo que consideramos es que el sector tiene que estar cuidado, protegido y apoyado para que cada vez sea más sólido. Estamos satisfechos con su evolución, pero queremos que cada vez sea más sólido. Tenemos que trabajar fuerte en cuanto a aumentar las exigencias y, además, dar seguridad jurídica a través de la ley. Tiene que quedar institucionalizado normativamente que el reaseguro es una política que tiene que continuar en el largo plazo.
Regularización
– ¿Cómo vienen cumpliendo las empresas con las relaciones técnicas?
– Yo hice mención en la reunión de PlaNeS, que hicimos a mediados de marzo, que nosotros desde hace dos años, venimos señalando que tenemos que ir desarmando las excepciones, que se habían convertido en una maraña generando una competencia desleal. La verdad es que pudimos avanzar muy bien al abarcar desde la compañía más pequeña hasta la más grande. De esta forma, 50 empresas ingresaron en planes de regularización para así normalizar su situación financiera.
– En la actualidad, ¿ninguna tiene un plan de excepción?
– Ninguna. Tienen un plan de regularización, que no es lo mismo. Lo primero que hicimos es mostrar su situación. Y se le planteó a cada una un plan de regularización para acomodar su capital, su situación financiera. 50 compañías están regularizando su situación con 2.500 millones de pesos de aporte de capital. Algunas se adecuaron de forma inmediata y a otras se les dio un año o seis meses. Si no desentrañábamos esta situación, la adecuación nunca se habría producido. Todas vienen cumpliendo con lo pactado y se analiza caso por caso cuando alguna tiene una dificultad. Pero en un contexto de crecimiento del mercado, no hay problema en cumplir. Nosotros mostramos la absoluta solidez del sistema. El problema es cuando uno no dice cómo están las entidades: eso genera incertidumbre. Ahora, si uno muestra la situación y las compañías que tienen dificultades aceptan capitalizarse y cumplen las normas, todas por igual, eso transparenta el mercado. Esto es muy bueno y se da, además, en un contexto en el que sigue habiendo interés por abrir nuevas empresas. Quedó claro que podía hacerse: había que tomar la decisión y llevarlo adelante.
Supervisión
– ¿Hay avances en la política de control?
– Dentro de PlaNeS se incorporó, como uno de los ejes principales, la mejora en la supervisión. En este marco, entre las distintas gerencias se articularon mecanismos de análisis previo para profundizar las inspecciones in situ. Asimismo, se destaca que en dichas inspecciones, se incorporaron otros procesos de verificación, como las verificaciones de pólizas y de cuadros tarifarios, así como de contratos y programa de reaseguro, en las cuales se pudo detectar prácticas observables que las entidades debieron regularizar. Para ello, una herramienta importante y necesaria para optimizar el trabajo del organismo y que se logró con el trabajo de todas las gerencias fue la elaboración del panel de control. En poco tiempo se contará con las alertas tempranas como disparador de la supervisión.
Por otra parte, un tema importante y preocupante para el organismo son los resultados técnicos negativos del sector, principalmente en el ramo automotores. En este sentido, se trabajó en la elaboración de un indicador de primas con la información de la póliza digital, que será incorporado al sistema de alertas tempranas.
Asimismo, y en el análisis de los resultados técnicos negativos que se observan, se profundizó el estudio a través de los informes que presentan las aseguradoras. En ellos detallan los motivos que provocaron tales resultados y las medidas que se adoptarían para revertir la situación. Como conclusión, se observó que en muchos casos no se verificaba un análisis real por parte de las entidades, sino que era una exposición para cumplir con lo requerido en la norma. Asimismo, tampoco se verificaba una correlación entre las aseguradoras con resultados negativos y la constitución de la reserva técnica por insuficiencia de primas, que debía penalizar las tarifas insuficientes. En función de lo expuesto, a través de la reciente resolución 38.935, se modificó el cálculo de la reserva técnica de insuficiencia de primas con la finalidad de lograr que aquellas entidades que operan con tarifas insuficientes deban constituir una mayor reserva, penalizando dicha práctica. Hay que resaltar que se espera que el cambio propuesto contribuya a que las aseguradoras constituyan reservas más sólidas en relación con el riesgo de tarifación insuficiente por la alta competencia o bien ajusten las tarifas a valores técnicos necesarios para afrontar los riesgos a los que están expuestos.
También es importante destacar que se incorpora mayor responsabilidad y tareas de análisis a los responsables del control interno y los actuarios certificantes para propender a que haya una real política de conocer los niveles adecuados de tarifas, así como el riesgo de operar con tarifas insuficientes.
(fuente: http://www.revistatodoriesgo.com.ar/Articulo.asp?id=3788)