(f) JUNIO ES EL MES DE SEGURIDAD VIAL
Junio es el mes de la Seguridad Vial. Durante todo este mes se realizan en escuelas y diversas instituciones de enseñanza y capacitación charlas abiertas, conferencias, talleres prácticos con el objetivo de concientizar sobre el respeto a las normas de tránsito, promover la educación vial como una estrategia para reducir los accidentes de tránsito y sus gravísimas secuelas, que en nuestro país alcanzan índices muy altos. El fin último es generar conciencia vial en toda la sociedad.
El día elegido es el 10 de Junio. En esta fecha se produjo un llamativo suceso, en el año 1945. Se decretó ese día el cambio del sentido del tránsito por la derecha, cuando en Argentina hasta el momento regía la norma que ordenaba el sentido del tránsito por la mano izquierda (al igual que en Gran Bretaña).
A 67 años la Argentina es uno de los países con más accidentes de tránsito, de allí la importancia de educar y concientizar a toda la sociedad, grandes y chicos, peatones y conductores para prevenir accidentes.
La educación vial es una estrategia para reducir los accidentes de tránsito. Ésta debe incluir el conocimiento de las señales y normas de circulación, el desarrollo de prácticas preventivas, y para sostenerse y ser duradera en el tiempo se necesitan de buenos controles y de un sector de supervisión que no haga excepciones, conformado por los actores del gobierno local de cada ciudad, de las instituciones educativas y principalmente desde la buena conducta de cada uno de nosotros, los ciudadanos, en todo momento y en todo lugar.
Las excepciones en seguridad vial, se pagan con muertes, discapacidades o en el mejor de los casos, grandes pérdidas materiales.
Los especialistas en el tema aseguran que el 85% de los accidentes se producen por causas humanas. La conciencia vial- como sostienen los especialistas- incluye a todos, peatones y automovilistas. El término vial tiene que ver con nuestro comportamiento desde que salimos de la puerta de nuestra casa hasta que regresamos al mediodía o a la noche. Durante ese tiempo transitamos de distintas formas: en un momento soy peatón, luego soy conductor, después me bajo del auto y vuelvo a ser peatón.
La educación vial no se predica, se practica, porque el buen manejo, el respeto por las normas de tránsito no es sólo una postura que se demuestra ante otros, es un valor , es algo interno, es una forma de ser que debe estar presente en cada momento y cada hecho, como respirar.
Fuentes: www.diarioelnorte.com.ar
www.cesvi.com.ar
(Nota realizada por María Belén Tosti, muchas gracias Belén)