El otro lado de Boca Río Uruguay Seguros

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Un equipo no está compuesto solamente por los jugadores que entran a la cancha, sino también por aquellos que trabajan al costado del rectángulo para que luego los protagonistas se luzcan. Boca Río Uruguay Seguros no es la excepción y cuenta con un cuerpo técnico conformado por profesionales de primer nivel que facilitan el trabajo del vóley en la institución hace ya varios años.

Encabezado por Marcelo Gigante, este equipo de trabajo incluye a Gonzalo Barreiro, asistente y estadista, Aníbal Barbero, kinesiólogo, y Sergio Parra, preparador físico. Juntos comparten el día a día del equipo, los entrenamientos, viajes, partidos e incluso una planificación y trabajo que se extienden más allá de la duración de la temporada. Por eso, conocen mejor que nadie la institución, los objetivos y lo que significa ser parte del mundo Xeneize. En esta charla hablan de sus tareas, objetivos, orgullos y sueños para la Liga 2014/15 que, para Boca, finalizó en la noche del lunes en semifinales ante Personal Bolívar.

– Para empezar, ¿cuáles son las funciones que desempeñan cada uno de ustedes en este equipo?

– Aníbal Barbero: Mi función es la de mantener al equipo siempre a disposición del técnico; me encargo de la salud del grupo y de la rehabilitación tanto en el campo de juego, como en los entrenamientos y en el departamento médico.

– Sergio Parra: Yo soy el preparador físico del equipo y tengo como objetivo que los jugadores estén en el mejor rendimiento físico posible en los momentos decisivos del campeonato. La idea es tener deportistas que rindan bien en el momento en que se los solicite y para eso dependo mucho de la labor de Aníbal. Es importante que lleguen en el mejor estado físico y atlético, con la menor cantidad de lesiones posible.

– Gonzalo Barreiro: Soy el estadista y asistente del equipo, mi función es recopilar los datos estadísticos de todos los equipos y del nuestro también. Como asistente, tengo que interpretar esos datos para crear un plan de juego, un plan de entrenamiento o una forma de mejorar el rendimiento individual o del equipo. Mi función más importante es la de hacer la planificación o estrategia a seguir para contrarrestar al equipo rival en función de las cualidades del nuestro.

– De acuerdo a sus funciones, ¿cuáles son sus objetivos a nivel profesional?

– Aníbal: Nuestro objetivo va de la mano de la victoria del jugador. En mi caso, es que los entrenadores dispongan de la plantilla completa en condiciones físicas y de salud óptimas. Estar dentro de un club de primera línea como es Boca, que se respete nuestro trabajo y tener los materiales disponibles para poder trabajar es importante, pero va de la mano con lo que consigue el jugador. Son ellos los que entran dentro de la cancha, pero el equipo somos todos y por eso también queremos salir campeones.

– Sergio: El objetivo principal de nuestro trabajo es que los jugadores puedan competir muy bien, que hagan el mejor papel dentro de sus posibilidades y si también podemos salir campeones, por supuesto que es un objetivo. Somos realistas y sabemos que no va a ser fácil, pero este año si hacemos las cosas prolijas y tiramos todos para adelante, se puede luchar hasta el final y obtenerlo.

– Gonzalo: Yo apunto mucho a lo individual porque creo que es fundamental. Me parece que la función del cuerpo técnico es interpretar lo que cada uno puede dar para que el grupo crezca. Para mí el objetivo es lograr salir campeones, pero a través del crecimiento del equipo. Ese cómo es muy importante: nosotros podemos tener un equipo individualmente mejor o peor, eso es relativo, pero el funcionamiento de equipo tiene que ser óptimo para lograr el resultado. Las individualidades no dan buenos equipos, el equipo se forma de pequeñas cosas que ensambladas, funcionan.

– ¿Cuáles son los motivos por los que ustedes se sienten orgullos de ser parte de este equipo?

– Aníbal: Una de las cosas que a mí me pone contento es que el jugador confíe en lo que yo le digo o hago como para que pueda sanar su problema. A su vez, ya sea en la victoria o en la derrota, que el jugador esté agradecido por lo que nosotros podemos hacer por él es una de las gratificaciones más importantes.

– Sergio: A mí me llena de satisfacción que cada jugador llegue en su mejor rendimiento y lo que a mí me da ese indicio es que juegan los mismos que empezaron el campeonato. Llegar al final y ver eso en la cancha, es lo que me da mayor satisfacción.

– Gonzalo: A mí lo que me llena realmente de orgullo es haber logrado una confianza que no pasa sólo por respeto o porque los jugadores me hagan caso, sino que respalden lo que les digo. Muchas veces acerté en lo que les indiqué y otras no tanto, pero cuando no acierto, siguen respetándome. Me enorgullece haber logrado una confianza tan grande que en el momento en que no acierto, me respalden.

– Como cuerpo técnico formaron parte de muchos equipos, ¿qué convierte a este en especial?

– Gonzalo: Lo primero que veo de este grupo es la predisposición, que es algo que logramos después de tres ligas juntos. Es importantísimo porque todos entendimos cosas y logramos una madurez que quizás en otros equipos no sabes si lo vas a lograr tan rápido.

– Aníbal: Una de las cosas que me parece importante destacar es haber mantenido una base donde sólo se modificaron algunos nombres. Además, nosotros también adquirimos experiencia, tratamos de solucionar problemas que teníamos en ligas anteriores y tenemos una confianza absoluta entre nosotros. Quiero destacar también que la relación con Sergio es ideal y en un deporte de alto rendimiento eso es muy difícil. La comunicación que tenemos entre nosotros y con los jugadores es muy buena y me parece que es lo que nos va a llevar lejos.

– Sergio: Para mí es importante destacar que a pesar de los nombres nuevos, la confianza en el cuerpo técnico es absoluta. Todos se contagiaron de las ganas y la motivación para trabajar en serio, sabemos que el trabajo duro es la única forma, que no nos sobra nada, pero que así podemos lograr cosas. Esa experiencia que adquirimos te da un día a día mucho más simple.

– ¿Cómo vive los partidos este cuerpo técnico?

– Gonzalo: Yo lo vivo como un jugador a nivel físico y mental: termino de jugar y si fue un partido largo y duro, hasta las 5 de la mañana no me duermo. Me siento cansado como un jugador: mi cabeza está a tres mil por hora y quizás también tiene que ver con la doble función de estadista y asistente que hace que no pueda relajarme nunca.

– Sergio: En mi caso con mucha emoción, empiezo pensando que voy a estar tranquilo, pero después me convierto en hincha: aplaudo, grito… De todas maneras, estoy presto a las indicaciones para asistir en el momento que sea necesario, pero la verdad es que no me puedo relajar.

– Aníbal: Yo soy muy efusivo, pero tampoco puedo perder la cabeza porque tengo que estar atento por si aparece alguna lesión o alguien necesita algo. Tengo que estar frío para resolver lo que surja, pero a veces salen un poco más las ganas y la motivación de adentro que otras cuestiones. Me voy de los partidos con sensaciones de alegría cuando ganamos y tristeza cuando perdemos, pero el cuerpo técnico lo vive de esta forma porque trabajamos hace mucho tiempo juntos y defendemos a fondo a nuestro equipo.

– ¿Qué es lo más lindo de ser parte de este colectivo de trabajo?

– Sergio: Yo estoy orgulloso de trabajar con este cuerpo técnico y toda la gente que organiza este proyecto porque confían ciegamente en mí. A la vez, tengo la tranquilidad de que todo va a estar bien porque si un jugador se lastima, Aníbal es un mago de la kinesiología, la rehabilitación y la recuperación. Lo mismo me pasa con Gonzalo, la confianza absoluta que él transmite en el banco es increíble. Da indicaciones como un autómata y da resultado, es el cerebro del equipo. Y respecto a Marcelo (Gigante), logró una serenidad como coach que es bárbara… Intuye muchas cosas del juego que es algo necesario para ser un buen entrenador.

– Aníbal: Lo principal es la buena onda y que todos somos fanáticos de lo que hacemos. Cuando te gusta lo que haces y estás en un ambiente donde te dan tú lugar, las cosas salen bien. Nosotros además somos muy unidos y estamos todo el día pensando qué podemos hacer para mejorar. Eso se ve reflejado en el grupo, el equipo tiene plena confianza en nosotros y hace que nos levantamos a la mañana y tengamos ganas de trabajar. Eso es impagable, no es por dinero, sino por las ganas y por el poder estar en un lugar donde la gente piensa como vos.

– Gonzalo: Este grupo te da ganas de venir a trabajar y en un punto deja de ser un trabajo. Es algo así como esa frase que dice que dejás de trabajar cuando encontrás el trabajo que te gusta. Da gusto hacerlo y hay esfuerzos que de esta forma, son más fáciles de realizar.

Fuente: Prensa Boca Río Uruguay Seguros.