ABRIR LA CAJA DE PANDORA. Solemos utilizar la frase «abrir la caja de Pandora» cuando queremos decir que que alguno de los actos que realizamos en la vida nos van a traer nuevos males o nuevas desgracias.
La historia de Pandora y su famosa caja se enmarca dentro del mito de Prometeo, que robó el fuego a los dioses para entregarselo a los hombres, según nos cuenta la mitologia griega.
Zeus se ofuscó mucho con los humanos y le ordenó a Hefesto que modelara una figura similar a las diosas, a la que éstas debían otorgarle dones. Así nació Pandora, la primera mujer, a la que Hermes le agregó la malicia.
Ya en la tierra, la criatura abrió por curiosidad una vasija en la que Prometeo (el titán que robó el fuego sagrado de los dioses para darselo a los hombres) había colocado todos los males.
De tal forma, Pandora desató todas las pestes sobre nuestro planeta. Algunos añaden a la historia que en el fondo del contendor estaba la esperanza.
“Abrir o destapar la caja de Pandora”, en la actualidad, indica que se puso al descubierto algo que puede acarrear consecuencias nefastas o imprevistas, aunque no haya sido la intención original, pues el que realiza la tarea que desencadena los acontecimientos quizás no tiene conciencia al respecto.