Gracias a las innovadoras reformas en sus sistemas previsionales durante la última década, los países de América Latina lograron que alrededor de 11 millones de adultos mayores de la región acceda a algún beneficio previsional. Este grupo de personas mayores de 65 años se encontraba excluido de los sistemas previsionales tradicionales, según el Banco Mundial. Durante las décadas 80 y 90 la mayoría de los sistemas de pensiones de América Latina fueron objeto de reformas destinadas a mejorar su sustentabilidad financiera, pero desde hace algunos años los esfuerzos están dirigidos a lograr una mayor inclusión a partir de diversos programas tales como la expansión de las pensiones no contributivas o la flexibilización de requisitos de acceso a los sistemas tradicionales de pensiones contributivas.
“No existe una receta única para proteger a los adultos mayores excluidos del sistema de jubilaciones y pensiones. Cada país parte de niveles de cobertura diferentes, se enfrenta a desafíos y características particulares que requieren de políticas flexibles”, aseguró Rafael Rofman, especialista líder en protección social y co-autor del libro del Banco Mundial ‘Más allá de las pensiones contributivas. Catorce experiencias en América Latina’. “No obstante, -aseguró-lo que sí se puede afirmar es que a pesar de esas diferencias existentes, todos los países de la región están en un camino de inclusión”, agregó. «En América Latina hay un cambio de paradigma, hoy se busca incluir más gente y reducir la pobreza”, aseguró Ignacio Apella, especialista en protección social y co-autor del estudio. Las reformas estudiadas muestran una importante mejora en la cobertura de los adultos mayores de América Latina.
Los desafíos hacia el futuro parecen estar por consolidar estos cambios, asegurando tanto su sostenibilidad fiscal como el consenso político y social alrededor de las mismas, para dar continuidad a los logros en términos de inclusión alcanzados en los últimos años. El libro describe las iniciativas encaradas por los países de la región dirigidas a incrementar la cobertura de los sistemas de pensiones más allá de la población de trabajadores formales.
(fuente: Por redacción BDSAL – 02/12/2013)