(f) La declaración de Rio+20 reconoce el rol de las cooperativas en el desarrollo sustentable
El 22 de junio de 2012 el movimiento cooperativo hizo historia a través de la firma por parte de los países miembros de la ONU del documento de Rio+20 que incluyó una fuerte afirmación sobre la importancia de las cooperativas para el desarrollo de la agricultura, el trabajo y el desarrollo social y la reducción de la pobreza.
Rio+20 es la Conferencia sobre Desarrollo Sustentable de las Naciones Unidas 2012, 20 años después de la Cumbre de la Tierra realizada en 1992 en Rio de Janeiro, Brasil. 190 países se dieron cita en este evento (Rio+20) que se llevó acabo en Rio de Janeiro, Brasil, del 20 al 22 de junio de 2012. El foco de la conferencia fue promover una “economía verde” y también poner atención en la creación de un marco para lograr un desarrollo sustentable.
Dame Pauline Green, Presidenta de la Alianza Cooperativa Internacional (la organización internacional que representa a las cooperativas en 100 países alrededor del mundo) dijo en relación a este hito: “Los miembros y simpatizantes del movimiento cooperativo saben hace tiempo que las cooperativas ayudan a las personas a salir de la pobreza, promueven la equidad de género, realizan una devolución a las comunidades en que están insertas y lideran la atención de asuntos críticos sobre el desarrollo sustentable. Lo que las naciones hicieron hoy en Río, fue dejar sentado eso por escrito.”
Betsy Dribben es la Directora de Políticas de la ACI. A través de su participación en las negociaciones de ONU Río desde enero de 2012, Dribben notó que, una y otra vez, ministros y embajadores manifestaban que en sus países -ricos o pobres- las cooperativas eran importantes. Agregó que mientras que las negociaciones fueron usualmente lentas y a veces caracterizadas por la frustración de todas las partes, al final de la jornada todos pudieron coincidir en que “las cooperativas construyen un mundo mejor”.
“Tal como hemos venido diciendo repetidamente durante este Año Internacional de las Cooperativas, este modelo de negocios basado en valores realmente puede hacer que sucedan cosas buenas. Ahora los líderes de los países firmantes de la declaración de Río lo tienen claro, finalmente entendieron el mensaje”.
Destacó que desde el comienzo de las negociaciones, el gobierno brasileño estuvo comprometido en asegurar que las cooperativas fueran enfocadas como un elemento clave en el avance hacia el desarrollo sustentable. “Estamos agradecidos de que incluso cuando el proceso se tornó complicado, Brasil se mantuvo firme en hacer presión sobre los demás países para mantener el texto alusivo a las cooperativas en el documento”. Agregó que el movimiento cooperativo brasileño subraya cuánto pueden hacer las cooperativas para mejorar la calidad de vida.
Dribben también rindió tributo a la delegación canadiense, que comenzó las negociaciones en enero en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, solicitando el apoyo para que las “cooperativas agrícolas” fueran incluidas en el texto y continuó ese compromiso hasta Río. “Hicieron lo correcto para lograr este reconocimiento, con paciencia y resolución”.
Las cooperativas aparecen tres veces en el documento:
1) Reconocemos el rol de las cooperativas y microempresas en su contribución a la inclusión social y la reducción de la pobreza especialmente en los países en desarrollo. 2) Resolvemos para 2020 / 2030 incrementar la producción agrícola y productividad de manera sustentable, mejorando la función de los mercados y los mecanismos de apoyo internacional, particularmente para los países en desarrollo, en vistas a incrementar la inversión pública y privada en agricultura y desarrollo rural. Las áreas clave para la inversión y el apoyo incluyen: prácticas agrícolas sustentables; infraestructura rural, capacidad de almacenamiento y tecnologías relacionadas para significativamente reducir pérdidas post-cosecha y desperdicios de alimentos que se registran en el cadena alimentaria; investigación y en tecnologías agrícolas sustentables; desarrollo de cooperativas agrícolas fuertes y cadenas de valor; y fortalecer los vínculos entre el medio rural y urbano. 3) Alentamos iniciativas de gobierno tendientes a crear puestos de trabajo para las personas pobres, en la restauración y el manejo de los recursos naturales y los ecosistemas, y alentamos al sector privado a contribuir en la creación de trabajo decente y empleos verdes para hombres y mujeres, y particularmente para los jóvenes, incluyendo sociedades con pequeñas y medianas empresas así como con cooperativas.
(Muchas gracias. María Belén Gómez, por la información)