(f) Qué opciones tiene quien quiere un teléfono de alguna de las dos empresas
Las noticias que atañen a Nokia y BlackBerry han sido, en los últimos tiempos, complicadas. Tienen un punto en común: la propuesta de compra a ambas empresas ( parcial en el caso de Nokia , total en el de BlackBerry ).
Las ventas no se han concretado todavía, pero le ponen una duda clara y necesaria a quien estaba pensando comprar un celular de Nokia o de BlackBerry. ¿Conviene hacerlo? No es la misma respuesta para ambas situaciones. Para mí ambas plataformas eran, hasta ahora, muy recomendables; salvo algunas falencias (que tienen, en otros puntos, Android y iOS) y una menor oferta de aplicaciones, son dos opciones muy sólidas. Acá pueden leer mi reseña del BlackBerry Z10 y del Nokia Lumia 920 .
El caso de Nokia es más sencillo: después de una caída abrupta, las ventas de la compañía vienen creciendo en forma sostenida. Los números del último trimestre los tendremos a fin de octubre, unos días después de que la compañía presente, en Dubai, lo que se espera que sea su teléfono de pantalla grande (con un display de 6 pulgadas y una versión de Windows Phone 8 que permite pantallas Full HD, además de un procesadores de cuatro núcleos) y una tableta con Windows 8.
La compra propuesta por Microsoft (si se concreta) es una apuesta por mejorar y expandir la plataforma, no por cerrarla. Más allá de si lo logra o no, el futuro a corto y mediano plazo es positivo para los usuarios de Windows Phone -y de Nokia- porque deberían tener actualizaciones del sistema operativo y las aplicaciones, soporte, etcétera. De hecho los Lumia que tiene en desarrollo seguirán llegando al mercado, tanto con la marca Nokia como -eventualmente- con la marca Microsoft (que sería la dueña de la marca Lumia y tendría la licencia para usar la marca Nokia en teléfonos baratos).
Es decir: los equipos son tan buenos -o tan malos- como hace dos semanas, y como lo serían dentro de un mes. No dejarán de funcionar de un día para el otro por la venta, y tendrán sucesores, sea con la marca Nokia como con la marca Microsoft (y la plataforma Windows Phone excede, aunque más no sea un poco, a Nokia). Y, en principio, un número creciente de aplicaciones disponibles.
BlackBerry
La situación de BlackBerry es más compleja, porque no está claro qué intenciones tiene el grupo Fairfax con la compañía; se estima, en general, es que la compra le permitirá dejar la compañía cotice en la Bolsa y hacer cambios más drásticos y de largo plazo en la empresa sin tener la presión de los accionistas; Dell fue por un camino similar . En Wayerless hay un buen perfil de Prem Watsa , el hombre detrás de Fairfax Financial.
En el corto plazo la empresa seguirá funcionando; tiene bastante capital en el banco, negocios interesantes más allá de la venta de dispositivos (como su presencia en las computadoras de abordo de la mayoría de los autos) y las pérdidas trimestrales que adelantó (y que hará oficiales en su próximo reporte financiero el viernes) son por inventario no vendido, no por un rojo operativo. Claro, nada de esto le importa al usuario final: lo que uno quiere saber es qué pasa con los equipos vendidos o en venta.
Los móviles con BlackBerry 7 y anteriores dependen de los servidores de BlackBerry para tener conectividad; en el futuro próximo seguirán funcionando, pero su continuidad será más compleja si hay un cambio drástico en BlackBerry (aunque la compañía tiene obligaciones contractuales con múltiples empresas y unos 60 millones de usuarios, o más).
Los que tienen BlackBerry 10 (el Z10 que se vende en el país, el Z30 que se anunció hace poco , el Q10 y Q5 con teclado Qwerty) funcionan en forma independiente de los servidores de BlackBerry, así que seguirán ofreciendo lo mismo que ofrecen ahora aún si la firma se retira del mercado de celulares.
Sí habrá un impacto en la disponibilidad de aplicaciones nuevas y en las actualizaciones del sistema operativo (la versión 10.2 estará disponible a mediados de octubre). No significa que no vaya a haber más; Nokia lo hizo con el N9, al que dio soporte un buen tiempo después de que se lo declaró sin futuro.
¿Vale la pena comprar un Z10 hoy? Su fabricante no quebró ni cerró la plataforma (y si lo hace el smartphone no dejará de funcionar). Pero sí hay que entender que lo que BB10 hace bien lo seguirá haciendo; lo que hace mal tiene muchas menos chances de corregirse. A la vez, es una situación que no es extraña a la que vive la enorme mayoría de los usuarios de Android, que no tienen asegurada actualización alguna del sistema operativo ( hace un tiempo conté por qué en esta nota ). Sí es probable que se frene la llegada de aplicaciones nuevas, porque los desarrolladores preferirán orientarse a otras plataformas.
Decidir la compra dependerá, también, de la periodicidad con la que el usuario planee comprar un móvil nuevo, y qué tan atractiva le resulte la propuesta de BB10; BlackBerry ya informó que intentará vender los Z10 remanentes a un menor precio, y su plan antes de la propuesta de compra eran seguir vendiendo equipos (la línea nueva) pero como un jugador de nicho, para empresas -sus mayores clientes- y los denominados «prosumidores» (una mezcla de consumidores y profesionales); Prem Watsa no ha indicado, hasta ahora, qué decisión tomará sobre el futuro de la compañía si se realiza la venta.
En el corto plazo, entonces, todo sigue igual, pero lamentablemente para los empleados de BlackBerry, y para los que hoy tienen uno de sus equipos o están interesados en comprarlos, el mediano plazo es una incógnita. Habrá que esperar a que se aclare un poco el panorama
(fuente: lanacion.com.ar Por Ricardo Sametband– 26/9/13)