1- Las ciudades sustentables como escenario
Las ciudades son actores políticos y económicos cada vez más poderosos y se están transformando en el gran escenario de la sustentabilidad. A medida que la población urbana se incrementa de manera ya irreversible y que la perspectiva de las megalópolis es cada vez más cercana, la necesidad de gestionar las ciudades de manera sustentable se vuelve patente.
Los dos grandes acuerdos globales que están dando marco a la sustentabilidad como la COP21 o los ODS destacan en un primer plano el rol de las ciudades.
«Las ciudades han encabezado la lucha contra el cambio climático durante años y los alcaldes estamos determinados a implementar el Acuerdo de París«, comentó la alcaldesa de París y presidenta electa de C40, Anne Hidalgo. «Ahora, los gobiernos nacionales y regionales, junto con las instituciones financieras deberán actuar para dar a las ciudades el poder que necesitan para crear un futuro sostenible«.
En el marco de la Cumbre de Alcaldes C40 Madrid, Ciudad de México, Atenas y París firmaron un acuerdo en el que se comprometen a prohibir los automóviles a diesel para 2025 y promover alternativas como vehículos eléctricos, a hidrógeno y la bicicleta.
“Se necesita trabajar con el sector privado porque si bien los alcaldes podemos hacer mucho para avanzar en las agendas de desarrollo, por ejemplo promoviendo el reciclaje y el transporte limpio, no podremos abordar de una manera profunda el cambio climático sin cambiar la matriz de la energía. Y esto no puede ser una responsabilidad sólo de los alcaldes. Necesitamos a las empresas y otros grupos de interés que se involucren en la descarbonización del mercado de energía”, alertó Dr. Joan Clos, Director Ejecutivo de ONU-Habitat, en diálogo con ComunicaRSE.
La adopción masiva mundial de los teléfonos inteligentes crearán ciudadanos conectados y llevarán la gestión participativa a un nuevo nivel. Además de facilitar la distribución de alertas, servicios móviles e informaciones de interés, el uso de aplicaciones móviles permite aumentar la participación de los ciudadanos, quienes pueden enviar datos e información a los centros de gestión y control de la ciudad. El estudio Mobility Report 2015 proyecta que en cinco años el 70% de los habitantes a nivel mundial tendrán un teléfono inteligente y serán responsables de producir el 80% de todos los datos móviles del mundo.
La tecnología digital es un medio para transformar la infraestructura tradicional de la ciudad en un ecosistema vivo y sostenible que funciona en una calle de doble sentido, captando datos y brindando beneficios a las personas y los negocios que viven y trabajan en la ciudad.
Con sensores distribuidos en diversos puntos de la ciudad se puede tener información en tiempo real sobre el flujo de los ciudadanos, el nivel de ruido y otras formas de contaminación ambiental, así como sobre el tráfico y las condiciones climáticas. Esto permite a las autoridades optimizar las operaciones de la ciudad.
El profesor de la Harvard Business School, Michael Porter sostiene que el rápido crecimiento de las ciudades ofrece oportunidades desde un enfoque económico que busque proporcionar transporte eficiente, vivienda sostenible, una buena calidad de vida y una mejor salud para los ciudadanos.
2- Los ODS como factor de innovación en la gestión
Durante el transcurso de 2017 los países terminarán de definir sus planes nacionales adaptados a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). De esta manera, las empresas podrán tener más claros hacia donde van en esta materia los países en los que están operando y podrán reenfocar sus propios planes hacia dichas metas.
Para alinear de una mejor manera las alianzas público-privadas para el desarrollo sostenible, el Fondo ODS ha establecido un Grupo Asesor del Sector Privado, integrado por líderes de grandes compañías de diversos sectores a nivel mundial. Estos líderes están ayudando al Fondo a construir una hoja de ruta que explique detalladamente cómo las alianzas público-privadas pueden proveer soluciones a gran escala para alcanzar los nuevos ODS. Su objetivo es colaborar y discutir soluciones prácticas relativas a los retos comunes de la sostenibilidad contemporánea.
La irrupción de los ODS como nuevo mapa de gestión de la sustentabilidad ya está provocando cambios innovadores en las estrategias. Semanas atrás, la empresa de electrodomésticos Electrolux anunció que en función de la incorporación de los ODS a su plan de gestión había decidido centrar sus inversiones sociales en el ámbito de la alimentación sustentable, un issue no habitual para su industria y con el que espera tener un impacto positivo en los ODS “Hambre Cero” y “Consumo y producción responsables”. Otro ejemplo es la empresa Manpower Argentina que firmó un acuerdo con el Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA) y se animó a un tema complejo y sensible como es la reinserción al mundo laboral de mujeres víctimas de violencia de género para contribuir con el ODS vinculado a la Igualdad de Género.
Un informe de GlobeScan reveló que los CEO consideran que los ODS están influyendo en sus estrategias mucho más de lo percibido a fines del año pasado, de un 27% en 2015 a 38% en 2016 y que está incidencia será mayor en 2017.
3- Nuevas metas sobre Cambio Climático y descarbonización de la economía
Si bien la COP22 de Marruecos no presentó grandes novedades con respecto al Acuerdo de París, sí fue escenario para que las empresas mostraran avances en materia de lucha contra el cambio climático.
El dato más destacado fue sin dudas el incremento de empresas que anunciaron iniciativas sostenidas por la metodología conocida como “Metas Basadas en la Ciencia”, es decir alineadas y proporcionales a los niveles de descarbonización necesarios para mantener el aumento de la temperatura global por debajo de los dos grados. Esta iniciativa cobró relevancia sobre todo después de que Wal-Mart, una de las empresas más grande del mundo, se sumara.
Más de 70 empresas de 20 sectores de casi 30 países se han suscrito a los criterios de liderazgo empresarial sobre el precio del carbono, un conjunto de estándares ambiciosos para ayudar a las empresas a fijar un precio para el carbono e informar de ello durante el año próximo con el apoyo técnico del Carbon Disclosure Project (CDP).
Un grupo de casi 500 grandes empresas con más de 8 mil millones de dólares en capitalización bursátil han contraído más de mil compromisos ambiciosos de actuación frente al cambio climático que continuarán el año próximo.
China pateó el tablero y anunció que planea abrir un mercado nacional de carbono el próximo año que será el primero en su tipo creado a escala nacional y permitirá reducir emisiones a partir de 2020. Este país es responsable de casi el 30% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero. Con el nuevo mercado de carbono planea contrarrestar las emisiones generadas por su reciente proceso de industrialización.
“Será necesario respetar el compromiso de 100 000 millones de USD desde ahora hasta 2020. Ante la magnitud de lo que hace falta para hacer frente a los impactos del cambio climático, resulta imprescindible convertir miles de millones en billones. El año 2017 tiene que ser el año de los proyectos a gran escala, de la movilización de financiación, y del acceso a los fondos financieros que serán necesarios para la adaptación”, pidió Salaheddine Mezouar, presidente de la COP22.
La gran incógnita que comenzará a quedar resuelta durante 2017 es cuál será finalmente la posición de la primera potencia económica del mundo en materia de cambio climático a partir de los primeros pasos que de la administración Trump. Casi 300 empresas, firmaron una carta abierta al presidente electo, pidiéndole que se mantengan las políticas de Obama que buscan una nueva economía verde, y que deje a Estados Unidos dentro del Acuerdo de París.
4- Ética y Transparencia
Los coletazos de grandes fraudes empresariales como el de Volkswagen siguieron durante 2016 y prometen proyectarse hacia 2017. Por otra parte, el caso Panamá Papers puso nuevamente ante el ojo público algunos tramos oscuros del sistema capitalista global y del sector financiero en particular.
A nivel regional, América Latina se vio sacudida por los escándalos de corrupción en Brasil y Argentina que mantendrán vigente el debate sobre la necesidad de una mayor transparencia en el vínculo entre el sector público y privado.
Como consecuencia directa de esta situación, diversos países de la región están debatiendo proyectos de regulación del lobby. Torquato Jardim, Ministro de Transparencia de Brasil adelantó que se espera que para febrero de 2017 el gobierno presente un proyecto. En el mismo sentido, el secretario de Asuntos Políticos, Adrián Pérez anunció en octubre que el gobierno argentino está “trabajando en una ley de gestión de intereses” para el año que viene.
Atentos a esta demanda global, la ISO lanzó este año su norma de Compliance ISO 37001. El nuevo estándar fija requisitos para implantar un Sistema de Gestión Anti soborno en las organizaciones, ayudándoles a prevenir, detectar y gestionar adecuadamente posibles conductas delictivas de soborno, cumpliendo con la legislación y otros compromisos adquiridos de forma voluntaria, tanto en sus propias operaciones como es su cadena de valor. Diversas organizaciones privadas y públicas, como Ministerio de Energía y Minas (MEM) de Perú han iniciado el proceso de certificación para 2017.
El Parlamento europeo adelantó que tiene en estudio la creación de «listas negras» de empresas implicadas en prácticas corruptas, que no podrían acceder a contratos públicos ni fondos comunitarios.
Los ministros de Finanzas de los 28 países de la Unión Europea han alcanzado un acuerdo político para ampliar a todos los tipos de ingresos el intercambio automático obligatorio de información tributaria entre los Estados miembros. El objetivo de esta iniciativa, que se aplicará a partir de 2017, es reforzar la lucha contra el fraude y la evasión fiscal.
Finalmente, queda decir que organizaciones como Walden Asset Management, que hacen un seguimiento de la evolución de las peticiones de los accionistas, vienen registrando un creciente interés en conocer las políticas de gastos en lobby y gestión de intereses de las empresas que se incrementará durante 2017.
5- Acción urgente por la igualdad de género
El Informe Global de la Brecha de Género 2016 del Foro Económico Mundial revela que los avances hacia la igualdad se han detenido y que la brecha actual, que ahora mismo es de un 59 %, es la mayor desde 2008. Se debería, en parte, a los desequilibrios crónicos en los salarios y en la participación en el mercado de trabajo. América Latina es la región con la tercera brecha de género más estrecha, después de Europa y América del Norte.
Diversos organismos internacionales están redoblando esfuerzos para consolidar la agenda de la igualdad de género en la empresa a través de distintas iniciativas que tomarán impulso durante 2017.
El Plan de Acción de la OIT sobre Igualdad de Género 2016-2017 busca promover la igualdad de género y la no discriminación como principio en el mundo del trabajo. Durante el año próximo emprenderá una labor destinada a evaluar y abordar los efectos discriminatorios de procesos, instituciones, leyes y políticas aparentemente neutrales en las políticas de empleo, los programas de capacitación, las iniciativas de desarrollo empresarial y la formulación de políticas en materia de salarios y otras condiciones de trabajo.
La iniciativa “Impacto 10x10x10” de ONU Mujeres ,que busca comprometer a 10 jefes de gobierno, 10 empresas y 10 universidades para identificar enfoques innovadores para abordar la desigualdad de género, y poner en acción programas piloto para escalar el impacto de la campaña presentará los resultados de su experiencia durante 2017 y servirá de modelo para que más empresas se involucren.
El Panel de Alto Nivel sobre Empoderamiento Económico de la Mujer de la ONU presentó recomendaciones para empresas y gobiernos con foco en la participación compartida del cuidado familiar y el rol del sector privado en derribar estereotipos en los lugares de trabajo. “En estos seis meses les pedimos a diferentes empresas que ejecuten proyectos pilotos en los lugares de trabajo. Por ejemplo, PWC está produciendo un material sobre masculinidades en el lugar de trabajo. Otras empresas están analizando las diferencias de género en su cadena de valor. Citi Bank, que es parte del Alto Panel, está facilitando apoyo a empresas para trabajar en temas de género. Pedimos a más empresas que se sumen a estas iniciativas” afirmó la directora de ONU Mujeres ante una pregunta de ComunicaRSE. En marzo de 2017 se presentarán los avances de esta experiencia.
(fuente: http://www.comunicarseweb.com.ar/noticia/cinco-tendencias-en-sustentabilidad-para-2017)
